Dentro del proyecto “El Colegio Nacional Tras la Huella”, en la noche del jueves se llevó a cabo una disertación tendiente a revalorizar y destacar la figura del doctor Marcos Antonio Figueroa, quien fuera designado como rector de dicha institución escolar en 1883, por parte del entonces presidente Julio Roca.
La exposición estuvo a cargo del doctor Arturo J. Figueroa, quien es miembro titular vitalicio de la Sociedad Argentina de Historiadores, fundada por Enrique Gandian, y miembro fundador del Instituto Histórico Nicolás Avellaneda, quien brindó un amplio repaso de la vida de quien fuera su tío-bisabuelo. “Se trató de un hombre que ocupó casi la totalidad de los cargos públicos en la provincia, como Gobernador, Presidente de la Corte de Justicia, diputado nacional, entre otros, y que, por su trayectoria, fue distinguido por el Presidente Roca como rector del Colegio Nacional, y cuya novedad fue comunicada en su oportunidad por el en ese momento ministro Wilde”, explicó el historiador.
“Se trató de una figura de distinguida actuación en el escenario nacional, principalmente en el Congreso, en el cual representó a su provincia natal con singular talento”, expresó al tiempo que aseguró que fue presidente de la Corte de Justicia durante varios periodos, y más tarde, al actuar de lleno en política desempeñó importantes cargos públicos. “De 1880 a 1882 ocupó una banca en el Senado Nacional y demostró su versación en los estudios públicos, interviniendo en los debates que motivaron la sanción de las leyes de federalización de la ciudad de Buenos Aires y de organización de los tribunales. Igual notoriedad alcanzó en el debate en que se discutió la ley que ordenaba practicar estudios para la construcción de una línea férrea que uniera Recreo con Chumbicha, pasando por Totoralejos”.
Figueroa rescató en su disertación la participación de estudiantes y cuerpo docente del Colegio, como también de los diversos invitados especiales. Sin embargo, se mostró “extrañado” sobre la ausencia de miembros de la Corte de Justicia y del ámbito judicial, más aún cuando “estamos en la época del Bicentenario y se debe rescatar el accionar y el aporte de aquellas figuras que efectuaron un trabajo de significativa valía para la provincia y la Nación”. Incluso, culminó su conferencia expresando: “El ilustre Nicolás Avellaneda dijo, en su momento, que los pueblos que olvidan sus tradiciones pierden la conciencia de sus destinos, y los que se apoyan sobre las tumbas gloriosas son los que mejor preparan su porvenir”.
El doctor Marcos Figueroa fue también legislador provincial, ministro de Gobierno y Gobernador interino de la provincia de Catamarca en 1877. Falleció en Capital Federal el 25 de Julio de 1891.
“Sin lugar a dudas se trató de una de las figuras públicas más prominentes que tuvo Catamarca en el 1800, y que influyó en distintos ámbitos en los que actuó”, expresó el jueves por la noche Figueroa, ante una destacada audiencia que se dio cita en las instalaciones en el Salón de Actos del Colegio Nacional.