La empresa Polar, poseedora de la licencia de Coca Cola en el sur del país, definirá hoy si acepta o no la conciliación obligatoria dictada por la cartera laboral y que dispone la reapertura de la planta de Neuquén y la reincorporación de todos los trabajadores despedidos la semana pasada.Si Polar no acata la conciliación obligatoria dictada por Trabajo, mañana podrían paralizarse todas las embotelladoras de la gaseosa en el país. Hasta ayer, seguía ocupada la planta de Neuquén y paradas las de Bahía Blanca y Trelew, según revelaron fuentes sindicales del sector de trabajadores de Aguas Gaseosas.

La empresa y el nucleamiento sindical mantuvieron ayer una reunión en la delegación neuquina de la Cartera Laboral, pero no se produjeron avances y esta medianoche vence el plazo para que Polar defina si acepta la conciliación.

El conflicto se inició el martes cuando Coca Cola impidió el ingreso de los 143 operarios de la planta y a través de un comunicado de prensa, informó su decisión de trasladar sus actividades en Bahía Blanca, lo que implicaba el cierre de la fábrica en Neuquén y el despido de todo el personal.
 

Frente a ese anuncio, los trabajadores respondieron con la ocupación de la planta y paralizaron la producción y distribución de los productos de Coca-Cola en la región.
El personal de las fábricas de Bahía Blanca y Trelew dispuso un paro por tiempo indeterminado en solidaridad con los trabajadores neuquinos, al que se sumaron también los camioneros encargados de las tareas de distribución.

Fuente: impulsobaires.com.ar