Gran repercusión tuvo entre la población de Belén la noticia de que un turista que visitaba el departamento habría filmado llagas con sangre en el cuerpo de una imagen de Cristo, ubicada en el museo sacro de la Parroquia de Nuestra Señora de Belén.
Ese Cristo es toda una reliquia para la comunidad, ya que estuvo en el altar mayor que fuera derrumbado por modificaciones en el año 1965.
Las versiones, difundidas por el sitio web “lavozbelicha”, detallan que una turista proveniente de EE.UU. filmó la imagen en el museo, y que al retirarse le llamó la atención una gota de agua en el pecho, algo que en el momento de la filmación no fue observado, y al tratar de filmarlo nuevamente con esa novedad, pudo apreciar mediante la lente que el Cristo mostraba sus llagas, por donde empezó a fluir sangre desplazándose por el cuerpo. La situación, se asegura, generó “conmoción, sorpresa y lógicamente alteraciones en el estado emocional” de los presentes.
Como primera reacción, la turista le comunicó al párroco lo sucedido, aunque no trascendió qué respuesta obtuvo. La comisión que mantiene el museo dio detalles del hecho a las autoridades del obispado.
El miércoles por la tarde fue incesante la visita de fieles para captar con sus cámaras o teléfonos toda vivencia que pudieran obtener.
Ayer, en el mismo salón, se proyectaron en video todas las secuencias captadas por la turista, según informó Carlos Torrente, secretario de la Comisión de Investigación Histórica del Santuario Ntra. Sra. de Belén.