"Vamos hacer la reunión de consejo directivo seguramente para establecer un plan de lucha, convocado también después de esta reunión a la CGT Azul y Blanca, a la CTA que estamos trabajando unidos en la acción, porque no se puede seguir así". Con esa frase, Gerónimo "Momo" Venegas, titular del gremio de los peones rurales, confirmó que la CGT que conduce Hugo Moyano analiza lanzar un nuevo paro contra el Gobierno en reclamo de aumentos salariales y cambios en el Impuesto a las Ganancias, entre otros puntos.

A fines de noviembre del año pasado, la CGT de Moyano paró junto a la CTA opositora de Pablo Micheli, la CTG Azul y Blanca de Luis Barrionuevo y la Federación Agraria de Eduardo Buzzi, entre otras agrupaciones.

Moyano confirmó ayer que reunirá este miércoles a la plana mayor de la CGT Azopardo, para la primera cumbre de 2013 del Consejo Directivo. Tal como adelantó ayer este diario, el camionero juntará a su tropa para retomar los reclamos contra el Gobierno, sin descartar la convocatoria a un nuevo paro nacional para marzo próximo.

En declaraciones, Venegas ratificó esa opción y justificó: "Lo único que podemos hacer los trabajadores es movilizarnos o hacer paro". El dirigente dijo que con la eventual medida de fuerza buscan que el Gobierno los convoque a negociar.

"Nosotros no podemos discutir nada con el Gobierno porque no nos atiende. El Gobierno a nosotros nos ha dejado helado para negociar con la CGT Caló, lo que pasa es que la CGT Caló tampoco puede negociar si realmente no se levanta el techo del mínimo no imponible que se le está quedando a los trabajadores con las horas extras", sostuvo Venegas.

Al respecto, alertó que "los médicos no hacen doble turno porque se lo lleva el impuesto a las Ganancias". Y acusó al Gobierno de estar "fomentando el trabajo en negro".

El encuentro de la CGT de Moyano fue convocado para las 15 de mañana en la sede de la calle Azopardo al 800, adonde además de Moyano asistirán los principales dirigentes de la entidad, entre ellos, el secretario adjunto, Guillermo Pereyra, y Venegas. Con el receso veraniego aún en marcha, la CGT opositora retomará rápido sus tareas, en momentos en que ya sobrevuela la idea de ir delineando el primer paro nacional contra la Casa Rosada, a fin de volver a plantear sus reclamos por el Impuesto a las Ganancias, la universalización de las asignaciones familiares y la deuda estatal con las obras sociales gremiales.

A todo esto se suma el tema de las futuras paritarias para negociar salarios, sobre lo que la CGT moyanista ya avisó que no aceptará "techos" de parte del Gobierno y alertó sobre la "inflación que está restando poder adquisitivo".