El director Provincial de Extensión Rural, Rubén Gil, visitó a los productores tinogasteños afectados por las lluvias y tormenta de granizo, entregándoles fungicidas para que puedan realizar las aplicaciones correspondientes de oxicloruro de cobre, sulfato de cobre y azufre. Éstas son medidas preventivas ante la posibilidad cierta de que exista un brote de peronóspera.
El funcionario dijo que desde el Ministerio se está trabajando con el sector y en forma conjunta con el Ministerio de Agricultura de la Nación, para poder conseguir fondos y acciones concretas para la zona vitícola de Tinogasta.
En cuanto a los inconvenientes en la comercialización de la vid, Gil señaló que el gobierno está trabajando en este sentido. “Hay ideas que se están elaborando en la Subsecretaría de Agricultura y Ganadería de la Provincia, y estamos trabajando con la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación. Estamos trabajando en pos de eso, es decir, sobre convenios y acuerdos de precios no tenemos nada, pero sí estamos trabajando.
“Es un problema que están teniendo casi todas las economías regionales a nivel país, caso de la fruta en el Valle Central. Casualmente hay costos que se han incrementado en dólares y nos están complicando a la hora de la comercialización. El año pasado el precio de la uva llegó a los 0.80 centavos menos el costo de traslado y acarreo, quedó en 0.60. No somos una provincia formadora de precios, sobre todo de la uva cereza, lamentablemente”, dijo Gil.
Sin embargo remarcó que la base de todo el proceso de cambio está directamente relacionada con el asociativismo, la mejora en tecnología, por ejemplo, “que los productores de Anillaco tengan un empaque, una cámara de frío, ellos pueden manejar la comercialización, vendiendo un producto con valor agregado”, concluyó.