En la tarde de ayer, Rosa Sigampa solicitó la asistencia de una dotación de la División Bomberos en su domicilio, ubicado en el barrio 40 viviendas norte, por temor a que se derrumbara la estructura.
Según comentó la mujer, “a la casa me la entregaron con roturas y grietas en las paredes, hoy tuve temor de que se venga abajo porque las rajaduras están cada vez más abiertas”. Una vez en el lugar, personal de Bomberos y Defensa Civil detectó la existencia de humedad en la estructura, lo que sería la causa del deterioro en la vivienda. En diálogo con El Esquiú.com, Sigampa agradeció la colaboración del personal que prestó servicios en el lugar.