El Centro Vecinal del barrio “20 de Marzo” organiza junto a los vecinos medidas de fuerza en reclamo por la gran cantidad de agua servida que permanece en las calles del lugar, producto de problemas en barrios aledaños. Las calles contaminadas llevan más de un año, mientras los habitantes del lugar aseguran que no les dan respuesta en ningún organismo público. El agravante del caso es que las líneas de colectivos dejaron de transitar la zona ante los grandes pozos de agua de cloaca que anega las vías de tránsito.
La secretaria del Centro Vecinal 20 de Marzo, ubicado en la zona sur de la ciudad, Zaira Justiniano, alertó a El Esquiú.com sobre cómo viven los vecinos rodeados de contaminación cloacal desde hace tiempo por desidia y falta de acción de los organismos públicos.
Aseguró que “desde la comuna nos dijeron que no pueden hacer nada porque no tienen competencia, ya que es Aguas de Catamarca desde donde deben venir a solucionar el problema. Sin embargo, desde hace meses que los llamamos y no vienen. Mire cómo vivimos, ya no podemos seguir viviendo así, no sabemos qué hacer para que nos escuchen, quizás cortando las calles nos den una respuesta”.
En este orden, los vecinos mostraron cómo las aguas servidas destruyeron el asfalto, generando un enorme cráter repleto de agua de cloacas. El olor que emana el pozo es nauseabundo y contaminante, por lo que los vecinos analizan qué medidas tomar para que desde algún organismo se solucione el problema.
Mediante un recorrido por el barrio, los pobladores advirtieron que las aguas servidas que mantienen en la mayoría de las bocacalles del barrio 20 Marzo, desembocan desde las cloacas del barrio Santa Marta, en donde están tapadas de basura, producto de un mal uso vecinal. “Hemos hablado con los vecinos, les dijimos que se deben limpiar y nos dijeron que no son ellos sino miembros de una cooperativa quienes ensucian las bocas de cloaca, y como este barrio es en bajada, todo se viene. Lo peor es cuando llueve,” mencionaron.
Por último, los vecinos aseguraron estar preocupados porque las líneas de colectivos dejaron de pasar por varias calles del barrio, producto de lo intransitable e insalubre que es recorrer el lugar. “Estamos preocupados porque las líneas cambiaron de zona para pasar por los pozos de aguas servidas, ahora van a comenzar la clases y los niños se quedaron sin transporte,” sentenciaron.