La semana pasada, en coincidencia con la visita de la gobernadora Lucia Corpacci al departamento Tinogasta, el ministro de Servicios Públicos Ing. Luis Romero y el director de Agua y Saneamiento del Interior, Técnico Eduardo Álvarez, acompañados por técnicos del organismo, realizaron visitas a distintas localidades de dicho departamento a los fines de inspeccionar y realizar un relevamiento de las necesidades de cada lugar.
La primera de las visitas se llevó a cabo en la localidad de Los Palacios, dónde se realizaron trabajos de cambio de una bomba ya que la localidad se encontraba sin agua. De este modo, se realizaron los trabajos poniendo en funcionamiento el equipamiento, asegurando la normal provisión de agua potable al lugar.
Luego se trasladaron a Medanitos, donde se tiene previsto una nueva perforación y la realización del cerco perimetral, lugar en el que está emplazado el equipo de bombeo. En La Soledad – La Banda, se receptaron las inquietudes de la Comisión del Centro Vecinal de Agua Potable sobre mejoras en la provisión del servicio.
En la localidad de Saujil también se inspeccionaron las perforaciones existentes, y se delinearon las alternativas a los fines de mejorar el servicio.
Ya en la localidad de Fiambalá, se visitaron todas las perforaciones existentes, verificando el funcionamiento de las mismas, como así también las mejoras sustanciales que se ejecutarán a los fines del mejoramiento del servicio. Allí se pondrán en funcionamiento nuevas perforaciones con sus respectivos equipos de bombeo con el objetivo de no tener problemas en la época estival.
Debemos tener en cuenta que esta localidad cuenta con 1.832 conexiones domiciliarias, siendo la subterránea la única fuente de provisión. Todas las perforaciones existentes funcionan prácticamente las 24 horas, consumiendo un alto grado de energía para su funcionamiento. Por lo tanto, es importante crear conciencia sobre el uso indebido que se le da al servicio ya que se tomarán medidas correctivas a los fines de mermar el consumo, que en la actualidad supera ampliamente lo que establece la Organización Mundial de la Salud que es de los 250 litros por habitante.