El intendente de la Capital Raúl Jalil fue terminante en sus declaraciones ayer al asegurar que “es imposible que el municipio contrate o pase a planta permanente a más empleados”. Fundamentó la posición al señalar que “hay una restricción de la Carta Orgánica. Según ella, no podemos superar el 65 por ciento del costo en gasto de salario, y no estamos en condiciones de poner nada en riesgo”.
Los dichos de Jalil corresponden a las manifestaciones públicas de más de un centenar de beneficiarios del plan de Capital Social que prestan servicio en el área de Higiene Urbana de la comuna capitalina, quienes a modo de reclamo interrumpieron los ingresos a las instalaciones de avenida Acosta Villafañe, mientras que otro grupo interrumpió la circulación vehicular en calle Rioja frente al Palacio Municipal. Los piquetes generaron complicaciones en el tránsito vehicular, al mismo tiempo que vecinos de avenida Villafañe manifestaron su malestar por la quema de neumáticos.

Polémica decisión

En declaraciones a la prensa, consultado sobre el reclamo de los trabajadores del plan de Capital Social, Jalil respondió: “Yo ya di la orden de dar de baja a quienes se sigan manifestando”. Esta expresión reforzó el malestar de los beneficiarios y generó que los piquetes se trasladen también al Palacio Municipal.
Por segunda vez en la semana, más de un centenar de beneficiarios del plan de trabajo hicieron sentir su malestar impidiendo la salida de camiones de recolección de residuos y maquinaria del edifico de Higiene Urbana. El permanente reclamo de los trabajadores obedece a que “habría gente que ha sido contratada”, según sostienen.
En diálogo con El Esquiú.com, un grupo de manifestantes señaló: “Estamos cortando la calle porque es la única manera en quew nos van a escuchar. Es injusto que se den contratos solamente a algunos, y por acomodo, cuando todos tenemos los mismos derechos y las mismas necesidades”.
En relación al requerimiento de pase a planta permanente de la comuna de parte de beneficiarios de planes, desocupados y contratados, el intendente Jalil dijo: “En el municipio tenemos 7 mil personas inscriptas pidiendo trabajo, no estamos en condiciones de pasar a nadie a planta permanente, y si lo hacemos lo haremos cuando la gente se jubile; les pido paciencia”. A su vez, agregó que se debe tener en cuenta que “hay una restricción de la Carta Orgánica que dispone no superar el 65 por ciento del costo en gasto de salario”.

Situación complicada

El jefe comunal se refirió a la situación económica actual. Al respecto dijo: “Los problemas son graves. Lo que digo a los becados, a la gente, es que por mi forma de ser yo no actúo sobre la presión. Lo que digo es que a medida que el municipio tenga la posibilidad de incorporar gente, se hará. Hay algunos que están desde hace 20 años y están becados. Cuando podamos lo vamos a hacer, de forma paulatina y sin poner en riesgo las finanzas municipales”.
Por la tarde, Jalil y el secretario de Gobierno, Hernán Martel se reunieron con el secretario general del Soem, Walter Arévalo con quien acordaron la creación de un registro de personas que no pertenecen a la planta permanente de la estructura municipal para revisar la antigüedad y analizar las diferentes situaciones laborales. “Será una herramienta útil para ordenarla situación de todo el personal que presta servicios”, consideró Martel.