En el Congreso, durante el debate por el aborto legal, seguro y gratuito, la Coalición Argentina por un Estado Laico instaló carpas para fomentar la campaña "No en mi nombre". La organización asesora a las personas bautizadas que, por diferentes motivos, ya no se sienten representados por la Iglesia Católica y quieren renunciar.

¿Por qué apostatar? El Estado aporta 20 mil millones de pesos al año a la Iglesia, en proporción a sus fieles bautizados.

¿Cómo se realiza el trámite? Hay que enviar una carta, informando la decisión de dejar de pertenecer a la Iglesia Católica y solicitando que se modifiquen los registros donde la persona aparece como miembro de esa religión.

La carta debe ser enviada a la diócesis a la que pertenece la parroquia donde cada persona fue bautizada. La carta debe recibir una respuesta favorable en un lapso de cinco días. Si no llega, hay dos opciones: contactar a la diócesis para verificar el estado del trámite o hacer la denuncia en la Dirección Nacional de Protección de Datos Personales.

Tendencia en internet

Tras el rechazo al proyecto de aborto legal, el interés por la búsqueda de "apostasía" creció muchísimo en la Web. Es que muchos usuarios apoyan la iniciativa para que los bautizados se "den de baja" de la Iglesia Católica.

Cuestionamientos a la Iglesia

En ese marco, Pao Raffetta, miembro de la campaña Apostasía Colectiva e integrante de la Coalición Argentina por un Estado Laico, indica que lo que se pide la separación del Estado y la Iglesia, pero "sobre todo que el Estado deje de financiar actividades donde se involucra a la Iglesia Católica que, básicamente, tienen que ver con recortes de derecho de la ciudadanía: por ejemplo escuelas religiosas que reciben subsidios pero no dan educación sexual o dinero que va a centros de salud dependientes de la Iglesia que luego incumplen el programa de Salud Sexual y Reproductiva y se niegan a distribuir preservativos. La Iglesia es financiada por el Estado para cumplir un rol social y de cobertura de derechos pero a la vez utiliza ese dinero para negarse a que accedamos a esos derechos".