Personal de Vialidad Provincial continúa con los trabajos de reparación en las diferentes rutas que han sido dañadas por la crecida de ríos de los últimos días. 
El organismo ejecuta trabajos en las rutas 124, 34, 3 y 43, entre el resto que requiere la intervención del personal para otorgar transitabilidad. El administrador de Vialidad, Hugo Naranjo asegura que entre el 90 y 95 de las rutas se encuentran en condiciones de circular. 
Al respecto, Naranjo comentó: “Estuvimos trabajando fuerte, sobre todo por directivas de nuestra gobernadora, en la ruta 124 acá en Capayán, hemos logrado destrabar para que pueda pasar la gente y llegar a los pobladores de Trampasacha. Tenemos un trabajo arduo para recuperar esa ruta pero estamos en condiciones de recuperarla muy pronto”. 
En la misma línea, el administrador explicó que “donde tenemos problemas serios es en el norte de Fiambalá, en la ruta 34 por la crecida del río Grande, tenemos aisladas Las Papas, estamos esperando que deje de llover y que baje un poco el caudal del río para que podamos pasar, porque hasta el río nosotros llegamos sin ningún problema, pero las poblaciones están detrás del río, están aisladas por la crecida y hasta que no baje el caudal no tenemos posibilidades de recuperar transitabilidad del camino”. 
En tanto que en la ruta 3 y en la 46 que une Andalgalá con Belén debieron realizar la desobstrucción de badenes, las vías ya se encuentran en condiciones óptimas para transitar. 
En relación con otra de las rutas afectadas, Naranjo dijo: “Los problemas serios fueron en la ruta 43, el tramo de la ‘Quebrada de Randolfo’, donde tuvimos acumulación de casi tres metros de médano por el agua, logramos sacarlo y dimos transitabilidad. Otro problema fue en la ruta que va de Antofalla a las Quinuas, hicimos un desvío y salimos en Paucuqui. A la fecha, entre el 90 y 95 por ciento de las ruta provinciales están en condiciones de tránsito, algunas con precauciones, otras normal”.