De acuerdo a los datos proporcionados por el ministerio de Salud y Desarrollo Social la tasa de casos de sífilis reportados en varones y mujeres jóvenes y adultos se triplicó entre 2013 y 2017, ya que pasó de 11,7 a 35,2 por cada 100.000 habitantes.
A su vez, la proporción de positividad en las pruebas de rutina que se realizan a embarazadas pasó del 2% al 3,2% en el mismo lapso.

Al respecto, el director del Centro Único de Referencia, Alejandro Santillán Iturres, señaló: “Desde el año 2015 hay una tendencia en Argentina y también a nivel mundial, especialmente en los países subdesarrollados: el incremento en los casos de sífilis. Uno se expresa en tasas, porque las tasas reflejan un dato más significativo. Para dar un ejemplo, en el año 2015 teníamos 13 casos por 100 mil habitantes y actualmente 20 casos en la región NOA. A nivel país, la tasa de 2015 era de 20 casos por 100 mil habitantes y actualmente estamos en casi 40 casos por 100 mil habitantes”.

“Esto nos está indicando que hay acciones que hay que mejorar, como el diagnóstico temprano de sífilis, el tratamiento del paciente para cortar la cadena de transmisión. Por otro lado, esto también es un marcador subrogante de la falta de uso de preservativo y la tasa de aumento está concentrada en la edad de 15 a 24 años, franja en la que hay un pico muy alto, que es algo parecido a lo que sucede con HIV también”, indicó.

Asimismo, agregó: “A la par que aumenta el diagnóstico, aumenta la cantidad de casos, es decir, está en crecimiento en los últimos años. Las manifestaciones públicas en contra de la Educación Sexual Integral (ESI) han impedido que se ingrese a las escuelas a brindar charlas sobre el tema y el consumo de alcohol”.

Como se trasmite

La sífilis es una infección producida por la bacteria Treponema Pallidum (TP), transmitida fundamentalmente por contacto sexual y vía congénita y perinatal. Es de carácter sistémico, curable y exclusiva del ser humano.

Puede causar complicaciones a largo plazo o la muerte si no se trata de manera adecuada y se contrae por contacto directo con una llaga de sífilis en relaciones sexuales anales, vaginales u orales. Las llagas se pueden encontrar en el pene, la vagina, el ano, el recto o los labios y la boca.

También puede propagarse de una madre infectada a su bebé en gestación. Otra de las tasas que aumenta año a año es la de sífilis congénita.