El apagón que dejó sin energía a todo el país afectó varias actividades cotidianas, pero sin lugar a dudas, los pacientes electrodependientes y sus familias fueron los que más padecieron la falta de energía. 

El corte de servicio de más de nueve horas, generó preocupación e incertidumbre en las viviendas de las familias de pacientes que dependen de la energía para seguir viviendo. 

La carga de las UPS se terminaban, las luces de emergencia se apagaban y el servicio no se restablecía, tampoco había certeza sobre el horario en que la energía volvería a los hogares y las horas pasaban, “fueron momentos muy complicados”, contó la mamá de un niño electrodependiente. La intranquilidad y la impaciencia no son buenas compañeras en momentos en que hay que tomar una decisión para elegir la mejor manera de actuar a fin de que los niños no sufran. 

Andrea Castillo, mamá de un niño electrodependiente, narró cómo vivió el paso de las horas del apagón: “Fue todo un tema, a pesar de que yo tengo dos UPS, que son baterías que no te duran mucho, tengo luces de emergencia, se me apagó todo, no funcionaba nada, no tenía nada. A Dios gracias que hace dos semanas pedí un oxigeno más grande, un tubo aparte de tener todo lo otro. Con el tubo lo pude abastecer bastante, pero el tema es que necesito conectarlo a los otros equipos además. Fue todo un tema con el gordo, dentro de todo está bien, lo tuve bien, pero fueron momentos muy complicados”. 

Con el correr de las horas, comenzó a necesitar respuesta a sus preguntas, las que determinarían el accionar para buscar soluciones. “En medio del corte llamé a EC Sapem, me decían que no sabían a qué hora iba a volver, hablé con el contador Barot (Raúl), me decía que espere un ratito que ya iba a volver, que estaba retornando en algunas zonas, esto fue como a las tres de la tarde. En mi casa volvió a las 9 de la noche recién, a dos cuadras volvió como a las 7 de la tarde y eso me daba esperanza y a la vez me desesperaba. Cuando vi que eso pasaba llamé reclamando pero me decían que tenía que esperar, pedía que me hagan una conexión para tener hasta que vuelva, no había prioridad con los electrodependientes. No lo quería sacar a mi hijo porque estaba muy frío, pero si hasta la hora de dormir no volvía iba a tener que ir a la casa de algún familiar,  a lo de mi hermana, algún lugar donde ya haya vuelto la luz. Mi hijo no puede dormir  desconectado”. 

La situación que atravesaron el domingo pasado reaviva el reclamo de las mamás que solicitan generadores o paneles solares para momentos en los que la interrupción del servicio es de larga duración. 

En relación con el resto de las madres de hijos electrodependientes, Castillo comentó que “la mamá de Ángel se tuvo que ir al hospital porque el bebé no estaba bien; el resto de las mamás estaban bien, porque la mayoría no usa Bipap como mi hijo, no tienen apneas como mi hijo que no respira por sí solo. Pueden no estar conectados, mi hijo es el que más aparatos tiene y debe estar conectado para dormir o cuando le dan los episodios, pero gracias a Dios con las baterías de a ratos y el oxígeno pudimos salir adelante... Hay momentos en los que no sabés qué hacer, llevarlos al hospital significa que nuestros hijos se puedan contagiar de alguna enfermedad, es muy complicado sacarlos en climas como este, trasladarlos es algo que evitamos porque es mucha exposición para ellos. La mayoría no sabe lo que uno vive con nuestros hijos las veinticuatro horas, ellos dependen de la energía para vivir”.

El reclamo 
En este sentido, Castillo señaló: “Ahí está el motivo de nuestro reclamo, ya es la segunda vez que pasa, son cosas que van a suceder, no son cortes que duren poco. Nosotros el 2 de mayo reclamamos porque hay cortes que son por causa de la naturaleza, el de ayer que fue en todo el país y las UPS no nos duran, en cambio un grupo electrógeno o un panel solar sí nos abastece. El panel solar como fuente que guarda energía, al igual que el generador con nafta sigue generando y vamos a tener para los equipos. Con los paneles y generador vamos a tener energía para bañar los chicos, poder darles de comer, hay cosas que ellos se tienen que poner a pensar y darnos una solución. Nos tienen que dar una solución con un panel o un generador, también conectarnos con varias redes para que la energía nos alimente”. 

El reclamo continúa y situaciones como las del domingo pasado vuelven a poner en el tapete las necesidades de un grupo de personas para las que la energía representa la posibilidad de seguir viviendo.