Tras vencerse los plazos intimados al Gobierno, atento al compromiso que había asumido el Ejecutivo provincial con los gremios nucleados al Frente de Unidad y Solidaridad Sindical (FUSSI), sobre el planteamiento de una recomposición y piso salarial para este año, desde el gremio de los rebeldes convocaron a un paro provincial para la próxima semana.

Así lo declaró el titular del gremio de ATE, Ricardo Arévalo, quien volvió a insistir que el Ejecutivo provincial se haga cargo de la agenda y retome el dialogo con los gremios sobre los salarios, al considerar que el “80% de los trabajadores cobran el salario mínimo”, sumado a la inflación de este año es imperioso discutir sobre un “incremento salarial serio y continuo”.

 “Al no tener una respuesta concreta, ni mucho menos favorable, nos vemos hoy en la obligación a salir a peticionar lo que el mismo gobierno se ha comprometido en su momento y al no tener respuestas, los trabajadores y las bases vamos a salir a la calle a pedir que se dé cumplimiento a esa promesa del Gobierno de una reunión para seguir tratando la discusión salarial que no ha cerrado este año y que por lo tanto la caída del poder adquisitivo amerita que la semana que viene estemos en la calle con un paro a nivel provincial”, manifestó el sindicalista.

El abogado del gremio, Iván Sarquis, también se refirió al tema al sostener que el pedido es por un “piso salarial” para todos los trabajadores, al considerar que la propuesta del 21% del Gobierno, a pagarse en dos partes era,  “bastante escueta”, por lo que quedó pendiente un segundo encuentro para tener “una discusión verdadera y no un aumento unilateral por parte del Ejecutivo”.

“El aumento del 21%, entregando un 10% en diciembre, nos parecía que $6.000 en los mejores de los casos y para la mayoría de los afiliados era paupérrimo y no condice con la situación actual”, indicó Sarquis. Y consideró que ante” la escalada inflacionaria que esta por arriba de un 40% interanual y la perdida de la capacidad adquisitiva de los salarios también  tiene una afectación en la economía estatal”.

 “El petitorio que fue entregado al Gobierno habla claramente sobre una recomposición salarial de continuidad y de ninguna manera un bono, a menos que este a la altura de las circunstancias y sea la continuidad para un aumento de aquí a dos meses, será cosa a discutir en la mesa con el Gobierno”, insistió Arévalo.

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