Días atrás, un entrerriano visitó Catamarca, acompañado por su bicicleta. Se trata de Arnoldo Serrano, que a sus 81 años, recorre el país arriba de las dos ruedas. “Pepe” comenzó hace cuatro años, luego de abandonar la actividad comercial. “Me dediqué a no estar en mi casa frente a un televisor y a una heladera”, explicó.

Luego, mencionó que inició con las travesías en bicicleta porque “vivía con un hijo y se fue a trabajar a otra ciudad. Cuando quedó solo, dijo: ‘A mí la casa no me atrapa’. ¿Qué significa? Que te quedes sentado, dando vueltas, mirando televisión, que abras la heladera. Entonces, tomás otra dimensión. Decidí en ese momento empezar a salir a caminar a la mañana, al mediodía salir en bicicleta y a la tarde caminaba otra vez, 10 kilómetros por día”.

También señaló que, tiempo más tarde, “empecé a salir solo. Y me empezó a quedar chico el hacer 50 kilómetros”. 
Por ello, decidió viajar. “Fui armando el equipo y un día dije: ‘Me doy la vuelta de Entre Ríos’. Y la di. Entonces, fue adictivo. Nunca más me bajé de la bicicleta. Siempre estoy proyectando”, indicó.
Serrano comentó que se encuentra de paso por Catamarca. 

“Salí desde Santa Fe en una travesía desde el 21 diciembre (de 2019) para llegar a Neuquén en marzo. Estoy en viaje. El objetivo es realizar desde Jujuy hasta Neuquén, concretar una travesía que estoy haciendo en cuanto a unir El Angosto de Jujuy con Ushuaia (Tierra del Fuego)”, destacó.

“Pepe”, además, contó que en total lleva 18.500 kilómetros hechos en bicicleta.
En cuanto a su día a día en la bici, aseguró que “viajo una determinada cantidad de hora por día, no hago grandes cantidades de kilómetros, pero es una secuencia de andar todos los días. No viajo en agosto, en noviembre, en diciembre. Después tengo todo el tiempo (para andar en bici)”.

Consultado sobre el tiempo que pedalea por día, resaltó que “no te podés proponer horas” y “cuando voy cansado, paro en la ruta. Camino, a lo mejor tomo algo, le saco fotos a las flores, pierdo el tiempo, me relajo”.

Serrano relató que “me ha tocado dormir a la intemperie” en Mendoza, por la pinchadura de una goma. “Son dificultades que las tenés que vencer. Son las peripecias que tenés en el camino. Salís dispuesto a  tener dificultades. Tenés que estar dispuesto a que vas a tener dificultades, problemas de cualquier tipo”, destacó.

Entre sus logros, Serrano mencionó que “di la vuelta alrededor de la provincia de Entre Ríos, de la República Oriental del Uruguay. Después, uní los dos océanos. Siempre en bici”.

Equipaje
“Pepe” lleva alforjas en su bicicleta. Allí guarda una carpa “liviana” y otra más grande, que luego se encarga de armar para pasar la noche en diferentes lugares. “Llevo herramientas, lo básico. Cinco o seis cámaras (de bici)”, añadió. Y consideró que “la idea es que tenés que arreglártela solo”. “Tengo suerte. No tengo problema con el tránsito. O por lo menos, trato de minimizar”, dijo.

Provisiones
También señaló que en las alforjas lleva avena, polenta rápida, arroz, paté, atún para cocinar en el camino. Aunque, deslizó que “si puedo conseguir algo para comer, no cocino”. “Cuando vos estás en tu casa, tenés una forma de vida, estás en una zona de confort. Tenés todos los elementos y podés tener todas las posibilidades de hacer lo que se te ocurra. Cuando salís en bici, cambiás. Renunciás a la zona de confort y te limitás a un montón de cosas”, aseguró.

“Lo puede hacer cualquiera” 
“Pepe” remarcó que “lo puede hacer cualquiera”, pero “no le recomiendo a nadie, con la edad mía, subirse a la bicicleta. ¿Por qué motivo? Porque uno tiene una edad para caerse y golpearse. Yo tengo la habilidad de poder andar, pero si tuviera que haber aprendido y me hubiera caído, me hubiera roto los huesos. Ya los huesos míos no tienen la dureza que tienen antes”.
“Está acá todo (se señala la cabeza). No es un misterio esto.  Es organización y estar convencido de que podés hacerlo”, cerró.