Los bares y restaurantes del centro capitalino comenzaron a reacondicionarse para recibir nuevamente a sus clientes, en caso de que el Comité Operativo de Emergencias (COE) les dé el visto bueno en la reunión de mañana. Algunos propietarios realizan trabajos de pintura en sus locales y otros preparan paneles para establecer distanciamiento entre las mesas. Los empresarios del sector saben que es probable que deban disminuir la recepción de comensales como medida de prevención por la pandemia de coronavirus.

“Es un proceso de adaptación para nosotros como gastronómicos y para la gente. Estamos a la espera, con una buena expectativa y la predisposición para adaptarse a todas las disposiciones. Nosotros, aproximadamente, teníamos un salón con capacidad para 100 personas, estimamos que se reducirá a la mitad”, comentó el encargado del restaurante Richmond, Roberto Miranda.
En tanto, la encargada de la casa de té Le Club, Claudia Castro, resaltó que “vamos a poner unas filtradoras de aire que limpia el aire de espacios chicos” y pidió que se dé a conocer el protocolo para comercios gastronómicos.