Al conocerse la noticia del fallecimiento de Evelina Fiani, madre del actual gobernador de Catamarca, Raúl Jalil, las redes sociales se inundaron de mensajes de apoyo y cariño para con la familia en este duro momento. Pero, ¿quién era Evelina?

"Evelina Fiani era la viuda del fundador del Sanatorio Pasteur, Don José Guido Jalil, fallecido en diciembre de 2010. Con Don José fueron padres de ocho hijos: Silvia Beatriz, José Guido, Fernando Miguel, Raúl Alejandro, Marta Evelina, Gabriel Eduardo, Andrés Emilio y Javier Ignacio, y tenían más de 20 nietos.

Guido conoció a Evelina, cordobesa descendiente de libaneses como él, cuando tenía apenas 24 años y vivió toda su vida con ella, a quien definía como el gran amor de su vida. Fue en una fiesta familiar, organizada para celebrar el cumpleaños de la hija de un paisano de su padre. Sin previo aviso, el dueño de casa llamó al joven Guido para que se le acercara. Cuando fue a su lado, el hombre llamó también a una muchacha, y desafiando el pudor de ambos aseguró: "Esta va a ser tu señora y yo voy a ser el padrino de tu casamiento". 

Crédito imagen: Rodrigo González 

Esa muchacha era Evelina, y Guido no la había visto nunca antes. Pero la predicción se cumplió como si se tratara de una sentencia del destino y los jóvenes hijos de inmigrantes se casaron en 1958. 

"Decidí que iba a ser mi mujer porque me conquistó con su humildad", recordaría luego Guido, quien formalizó su matrimonio en la Iglesia del Sagrado Corazón, ubicada en la intersección de las calles Buenos Aires y Obispo Oro de la capital mediterránea. 
Es un templo de belleza imponente conocido como la iglesia de los “capuchinos" brazo de la Orden Franciscana cuyos miembros se distinguían por el uso de "il capucchio”.

De la boda se recuerda un curioso contratiempo, que hoy genera sonrisas pero en su momento no causó demasiada gracia. 
Ocurrió que habían decido grabar el audio de toda la ceremonia para que la pareja conservara el recuerdo en un disco de pasta, y, quizás inspirado por aquel detalle, el Padre Celestino, al mando de la ceremonia, se lució con un mensaje conmovedor.
Sin embargo, cuando decidieron escuchar el disco, advirtieron que la grabación finalizaba en el preciso instante en el que el cura empezaba a hablar. 

Crédito imagen: Rodrigo González 

Evelina y Guido habían planeado irse de luna de miel a Bariloche, pero en medio de los preparativos del viaje la joven pareja se cruzó con Llamil Simes, pariente de su esposa, que los convenció para que cambiaran de rumbo y fueran a Brasil. 
Simes, un extraordinario futbolista cordobés, se había iniciado como delantero en Huracán de Parque de los Patricios, para brillar luego en Racing (donde permanece como tercer goleador histórico) y la Selección Nacional. 

Guido, amante del deporte en general y del fútbol en particular, disfrutaba de su compañía, y de la posibilidad de conocer a través de Simes a glorias de todos los tiempos, como Norberto "Tucho" Méndez, Rubén "Hacha Brava" Navarro y hasta el mismísimo Adolfo Pedernera. Todos ellos y muchos otros que supo conocer Guido Jalil brillaron con luces propias en las décadas del 40, 50 y 60. 

En el buque que los trasladó a Brasil, el joven matrimonio hizo amistad con ocasionales pasajeros, entre ellos un curioso mago que entretenía a todos en cubierta con trucos de naipes. De regreso, Evelina se dedicó al hogar y aunque acompañó a su esposo en muchos viajes, el centro de su vida fueron sus hijos y la familia.

Es reconocida por todos como el pilar de una historia de amor cuyas enseñanzas y protección se revelan en la unidad de toda la familia y el infinito cariño que le profesaban hijos y nietos".