Durante la mañana, las arterias del centro estuvieron colmadas
La gente aprovechó la reapertura de comercios para salir a la calle
En horario corrido y con protocolos de bioseguridad, los comerciantes volvieron a atender al público.Ayer, los comercios de Catamarca reabrieron sus puertas luego de varias semanas de parate por el aislamiento obligatorio que rige en el país ante el avance de la pandemia de Covid-19.
Tras ser exceptuados por el Comité Operativo de Emergencias (COE) provincial, los negocios capitalinos atendieron al público con horario corrido, de 10 a 18.
Debido a este retorno a la actividad de gran parte de los locales, hubo una multitud de personas en las principales calles del centro.
En la peatonal Rivadavia, se observaron filas de catamarqueños y catamarqueñas que esperaban su turno para ser atendidos en distintas casas de indumentaria.
Por la cantidad de público circulando, los equipos de tareas preventivas de la Municipalidad de Capital salieron a desinfectar las calles y a colocar alcohol en gel a los transeúntes.
Vale mencionar que, para volver a atender al público, los comercios tuvieron que establecer protocolos para evitar aglomeraciones de personas y para proteger a empleados y clientes. Por otra parte, los lavaderos, las concesionarias de vehículos, inmobiliarias y empleadas domésticas volvieron a ofrecer sus servicios y productos.
Alegría
Gastón Torres, trabajador de Calzados Silvana, dijo que el retorno se vivió “con alegría” después de haber permanecida por más de 40 días con el negocio cerrado y “tener recaudación cero”.
Torres resaltó que para ellos la cuarentena “fue muy dura, con un poco de incertidumbre” y “se hizo bastante dura la espera”.
También señaló que les llevará un año reacomodarse hasta que “se recuperen un poco las ventas”.
“Va a haber que lucharla por lo menos hasta fin de año y ahí ver qué rumbo seguir”, agregó.
Con respecto a la implementación del horario corrido, consideró: “Acá la gente no está acostumbrada a un horario corrido. Esperemos que cambie un poco la mentalidad de la gente y nos sea más cómodo el horario corrido, por lo menos en este tramo de la cuarentena”.
Actividad nula
María Celeste Calderón, propietaria de BSK Indumentaria, remarcó que tuvieron “nulidad entera de la actividad” y las ventas online fueron “mínimas”. Y dijo que, ante esta situación, debieron utilizar los fondos de la recaudación para cumplir con los sueldos del personal y los impuestos.
Dificultad
Daniel Castillo, de la juguetería Giro Didáctico, comentó que en el local “estamos con deudas” y “es muy difícil acceder a las ayudas oficiales que se anuncian muchas veces por televisión, pero terminan siendo anuncios vacíos porque cuando uno va a un banco y quiere acceder a la ayuda, es casi imposible. Siempre hay requisitos y trabas que hacen el acceso solamente para algunos”.