La ministra de Salud de la provincia, Claudia María Palladino, sostuvo que desde el último 30 de agosto se está trabajando para contener un brote de coronavirus que se convirtió en un “desafío” ya que no sólo cuenta casos detectados de la enfermedad en el Valle Central, sino también en el interior la provincia. 

”Estamos transcurriendo desde el 30 de agosto el último brote que tiene ver con varios clústeres, no sólo en el Valle Central sino también en el interior de la provincia. Y esto fue un gran desafío porque tuvimos que acompañar a los equipos regionales que realizaron los bloqueos de contactos estrechos”, señaló la funcionaria.

Palladino fue la primera ministra de una jurisdicción en participar del nuevo formato de reporte que estrenó ayer la cartera que conduce Ginés González García y que busca dar una mirada “más federal” a la situación epidemiológica que atraviesa el país.
En ese sentido, la intervención apuntó a relatar cómo la provincia había aprovechado los 105 días en que no tuvo casos para “preparar el plan de contingencia, conocer el virus, aprender de las experiencias de otras jurisdicciones y otros países”.
“De esta manera, se pudo organizar una serie de dispositivos que no tenían que ver sólo con lo asistencial sanitario sino también dispositivos comunitarios en articulación con diferentes actores que tienen que ver con los jefes municipales, de salud y seguridad”, explicó.

Respecto de la evolución de la pandemia en territorio provincial, la funcionaria señaló que al encontrarse casos “sin nexos (epidemiológicos) sólidos el Gobierno decidió retornar a una fase de aislamiento social para disminuir el tránsito de personas”. 
Por último, la ministra de Salud comentó que se trabaja con los municipios para la asistencia de las familias que deben ser aisladas.