El Obispo Diocesano de Catamarca, monseñor Luis Urbanc, comunicó que recibió la comunicación de la Santa Sede confirmando la fecha de la ceremonia de beatificación de Fray Mamerto Esquiú, que será el 4 de septiembre.

Dicha comunicación expresa que “el Santo Padre ha concedido que la celebración del Rito de Beatificación del Venerable Siervo de Dios Mamerto Esquiú, se llevará a cabo el 4 de septiembre de 2021, en Catamarca”.

Asimismo, señala que “el representante del Sumo Pontífice será el cardenal Marcello Semeraro, prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos”. 

Cabe recordar que en primera instancia la ceremonia de Beatificación de Esquiú estaba programada para el pasado 13 de marzo y que fue postergada atento a la situación epidemiológica por Covid-19.

Cabe destacar que el domingo comenzó la Novena Misionera con la cual la Diócesis de Catamarca, en comunión con la Iglesia en Argentina, se prepara para celebrar el 195° aniversario del natalicio de Fray Mamerto Esquiú, en el marco de la próxima ceremonia de beatificación del fraile catamarqueño.

En horas de la tarde, la Novena se realizó desde la casa donde nació, ubicada en la localidad de Piedra Blanca, departamento Fray Mamerto Esquiú.

Luego se celebró la Santa Misa, presidida por el padre Julio Murúa, Vicario General y presidente de la Comisión central organizadora del acto de beatificación, que se llevará a cabo este año en su tierra natal.

Los actos litúrgicos fueron transmitidos a través de las redes sociales de la parroquia de San José y los canales propios de la beatificación, del Obispado de Catamarca y de la Catedral Basílica.

Todos los días, hasta el 10 de mayo, se reza la novena en dos momentos: a las 9.30 y a las 18.00, con posterior celebración eucarística.

El martes 11, se celebrará la Eucaristía en distintos puntos donde transcurrió la vida de Fray Mamerto Esquiú:

-9.00- Piedra Blanca;
-11.00- Catedral de Catamarca;
-16.00- El Suncho; y
-19.00- Convento Franciscano de Catamarca. 

El Venerable Fray Mamerto de la Ascensión Esquiú nació el 11 de mayo de 1826 en la localidad de Piedra Blanca, hijo de Santiago Esquiú y María de las Nieves Medina. Su madre le impuso el nombre de Mamerto de la Ascensión, en homenaje al día en que nació: San Mamerto y el misterio de la Ascensión del Señor, que ese año había caído el mismo día.

Desde los cinco años comenzó a usar, por intermedio de su madre, el hábito franciscano que no lo abandonó en toda su vida, como promesa de su delicado estado de salud. Ingresó al noviciado del convento franciscano catamarqueño el 31 de mayo de 1836, y al cumplir 22 años se ordenó sacerdote, celebrando su primera misa el 15 de mayo de 1849.

Desde joven dictó cátedra de filosofía y teología en la escuela del convento; también se dedicó fervientemente a la educación siendo maestro de niños, a lo cual dedicó mucho entusiasmo, además de fervorosas homilías. Desde 1850 dictó cátedra de filosofía en el colegio secundario fundado por el gobernador Manuel Navarro. 

El día 9 de julio de 1853 y ante las autoridades de toda la Provincia, Esquiú pronunció su célebre discurso. En ese sermón Esquiú dejó asentadas tantas verdades, enseñanzas tan luminosas y un cuerpo de doctrina jurídica y sociológica tan sólido.
Fray Mamerto Esquiú fue consagrado obispo de Córdoba el día 12 de diciembre de 1880 y tomó posesión de su sede episcopal el día 16 de enero del año siguiente. Siempre creyó no corresponderle la dignidad episcopal.

Él mismo lo deja estampado en su diario personal. En la Catedral pronunció una breve homilía que causó honda impresión. Con humildad de santo, habló de sí para rebajarse, jamás se había oído en Córdoba algo semejante. 

Siempre acuciado por la fragilidad de su salud pero con una fe inquebrantable y una vocación de servicio, el Santo Obispo Esquiú falleció el día 10 de enero de 1883, en la Posta “El Suncho”.