La auto indagación y el registro de cómo nos sentimos durante la semana son tan necesarios como mirar el cielo y a los astros para poder entender de lo que va el mood y qué energía está disponible.

Venimos de una semana “resaqueada” de la Luna Llena en Aries, que terminó el domingo pasado; probablemente nos hayamos sentido irritables, con insomnio, mucha ansiedad, incluso pudo haber peleas y separaciones. Recordemos que una luna llena es el evento emocional del mes, y su influencia no terminó ese mismo día si no que continúa hasta la próxima luna nueva (25 de octubre). Entonces se seguirán presentando situaciones donde tenga que elegirme/priorizarme a mi mism@ en lugar de otr@s, ya que Aries es el signo del Yo. Situaciones en donde pueda observar si no me expreso por miedo a que la otra persona se enoje o me rechace; observar si hago cosas por “contentar” a los demás pero que van en contra de mi voluntad.

Hoy estamos con la Luna casi en su Cuarto Menguante transitando el signo de Cáncer. Es un mood para estar en nuestro hogar, entendiéndolo como aquel lugar que me permite acobijarme, que me da contención, que pueda darme lo que estoy necesitando. Es elegir detenerme para poder comprender y escuchar lo que me está atravesando: darle lugar y espacio al sentir.  Emanuel Fante dice “es necesario de vez en cuando, darle la espalda al mundo y charlar cara a cara con el mar que llevamos dentro”, y ese es el mood.

Durante toda esta semana la luna va a ir perdiendo su luz, y nosotros nuestra energía, es una etapa para “ser” en lugar de “hacer”, de introspección en vez de estar en el afuera, en especial porque estamos muy cerca del Eclipse Solar en Escorpio (25 de octubre) que viene a “eliminar para iluminar” situaciones, relaciones y patrones que ya no aportan más en nuestra vida para dejar espacio a lo nuevo.

A fines de esta semana, tenemos la “Venus Star Point”, conocida como la “estrella de la noche”. Se da cuando Venus llega a los mismos grados matemáticos que el Sol. Venus y el Sol se juntan en Libra y nos develan cuán dispuest@s estamos a recibir, a compartirme con un otr@. Es un mood para indagarnos si estamos satisfech@s con la vida que hemos creado, si esa vida es armónica y qué espacio de doy al disfrute.