Este lunes 14 de noviembre se celebra el Día Mundial la Diabetes bajo el lema “Educación para proteger el mañana”, una oportunidad para crear conciencia sobre el impacto de la diabetes en la salud.

La referente del equipo de OSEP y licenciada en nutrición Ángela Biagi advirtió que el tipo 2 de la diabetes es el más frecuente en la población mundial, especialmente en personas adultas, sin embargo, cada vez aumentan los casos de niños y adolescentes diagnosticados con diabetes tipo 2.

Esto es debido a factores como obesidad, sobrepeso y sedentarismo, así como por la predisposición genética: “Se empieza a ver en niños, que es algo que no se pensó nunca. Realmente es muy preocupante la obesidad infantil que hay”.

De igual manera, comentó que “en menos de 40 años se cuadruplicó la cantidad de diabéticos en la población y el 80% de los casos se podrían prever si no fuera por los hábitos de vida que tiene la sociedad”.

Asimismo, insiste en que la población tome conciencia de que la diabetes es prevenible. La recomendación es cuidarse toda la vida, tener hábitos saludables, como una alimentación equilibrada, ocho horas de sueño, realizar actividades físicas de forma frecuente, evitando así el sedentarismo.

La enfermedad  

La diabetes es una enfermedad crónica que se caracteriza por presentar niveles altos de azúcar en sangre. En nuestro país afecta a más de 5 millones de personas y genera graves complicaciones asociadas al deterioro en la calidad de vida y a una elevada mortalidad, con una disminución de 5 a 10 años en la expectativa de vida.

Se estima que uno de cada 10 argentinos de 18 años o más tiene diabetes y dado que, por varios años permanece sin síntomas, aproximadamente cuatro de cada 10 personas que la padecen desconocen su condición.

El diagnóstico se realiza mediante la medición de la glucosa en sangre en ayunas (glucemia basal) y se recomienda en todas las personas a partir de los 45 años y en los menores de 45 años, cuando existe al menos un factor de riesgo. Si el resultado es normal, repetirlo cada 3 años o más frecuentemente según criterio médico.

Factores de riesgo: familiares con diabetes, diabetes durante el embarazo, mujeres con hijos nacidos con peso mayor a 4 kg, sobrepeso u obesidad, sedentarismo, enfermedad cardiovascular, hipertensión arterial, colesterol alto, tabaquismo.

Síntomas más frecuentes: falta de energía, poliuria (orinar mucho), polifagia (aumento del apetito), polidipsia (beber mucho por sed), pérdida de peso llamativa, de forma brusca sin haber iniciado ningún tipo de régimen o tratamiento para ello; visión borrosa, infecciones urinarias a repetición, infecciones cutáneas a repetición, heridas que tardan en cicatrizar.