En la tarde de hoy y por "cábala", tal como hicieron a comienzos de año cuando les tocó colaborar con los incendios forestales en Corrientes, los bomberos voluntarios de Catamarca se reunieron en el Paseo de la Fe y frente a la Catedral Basílica saludaron a la Virgen del Valle pidiendo protección para un nuevo desafío: esta vez frente al fuego salteño. Luego, en caravana y al toque de sirenas iniciaron el viaje de unas 7 horas hasta el norte de Salta,  la zona más afectada por los incendios forestales de la región.

Un total de 28 bomberos y bomberas de los cuarteles de Santa María, San josé, Belén, Pomán y Valle Viejo, partieron dispuestos a sumarse a la lucha "cuerpo a cuerpo" que por estas horas llevan adelante también brigadistas y baqueanos de toda la región y combatientes del Plan Manejo del Fuego de Nación para impedir que las temerarias lenguas de fuego lleguen a las zonas urbanas de San Ramón de la Nueva Orán, la localidad más afectada. 

"En la tarde del miércoles el Ministerio de Seguridad de la Nación activó el protocolo a través de la Coordinación Única de Operaciones (CUO) cuyo objetivo es asegurar la participación efectiva de las Federaciones Provinciales de Bomberos Voluntarios en circunstancias de alerta máxima y/o desastres", indicó Alfredo Gómez, Director del CUO por Catamarca.  "De esta manera, y después de pedir la protección a nuestra Madre Morena, iniciamos la movilización de la Región E que conforman Catamarca, Tucumán, Santiago del Estero, Jujuy y Salta para trabajar en los 6 grandes focos activos que hay en la zona", agregó.

"Desde Catamarca llevamos lo necesario, en las seis camionetas con equipos de ataque rápido, 2 unidades de asistencia, más la brigada de comunicación y socorrismo, para desplegarnos en una geografía complicada, en lo que seguramente serán cuatro jornadas intensas del trabajo para el que nos venimos preparando hace 4 años, en distintas capacitaciones y emergencias. Creemos que la formación está dando sus frutos, lo comprobamos cuando tuvimos que colaborar en Corrientes y retornamos sanos y salvos, sin heridos y conformes de haber dado una mano importante contra los incendios. Esperemos esta vez también demostrar el esfuerzo de los bomberos y el compromiso de colaborar con nuestros hermanos salteños", señaló.
El norte de la provincia de Salta continúa amenazado por el impresionante incendio que se desató hace dos meses. Esta semana, a 70 kilómetros al oeste de la localidad de San Ramón de la Nueva Orán, el fuego continuaba avanzando por la selva de yungas y destruyendo todo a su paso. Al menos 40 mil hectáreas fueron afectadas por las llamas. 
Los diferentes focos dejarían como saldo un desastre ecológico de magnitudes que aún no se conoce en cifras oficiales, aunque en la comunidad de San Ignacio aseguran que solo allí ya se destruyeron cinco mil hectáreas de selva. Mientras que desde la Cámara de Obrajeros aseguran que el fuego ya arrasó unas 40 mil hectáreas de yungas, de las cuales alrededor de 25 mil son del departamento de Orán.