El pasado jueves llegó a esta redacción información sobre el vuelo de Aerolíneas Argentinas AR 1444 que despegó en el aeropuerto Felipe Varela, hizo escala en La Rioja y llegó a Aeroparque luego de sufrir algunos altercados. Sucede que los pasajeros que tomaron dicho vuelo expresaron malestar por distintas circunstancias que se presentaron durante todo trayecto. 
Guadalupe Dávila, pasajera del vuelo en cuestión, conversó con El Esquiú y nos contó su experiencia.
“Cuando se estábamos embarcando en Catamarca, uno de los pasajeros al parecer llevaba un cargador de arma entre sus pertenencias, por lo que lo apartaron de la fila y esto demoró 30 minutos el despegue. Después vi que el chico subió igualmente al avión”. 
Según relata Guadalupe, una vez en La Rioja mientras esperaban que suban los pasajeros que viajaban desde allí, el aire acondicionado de la aeronave comenzó a fallar provocando malestar en las personas que ya se encontraban a bordo aguardando el despegue. “Hacía mucho calor y todos se quejaban por la demora de 40 minutos que tuvimos allí también. Al final abrieron las compuertas del avión para que entre aire”. 
Cuando retomaron el vuelo, la pasajera asegura que a pesar de tratarse de un día despejado el avión hacía ruidos raros y se experimentaron maniobras extrañas. “Estoy acostumbrada a volar en avión, pero la turbulencia que vivimos no me pareció normal”. 
Varios pasajeros pidieron explicaciones por lo vivenciado.  Al comienzo, la tripulación informó que el desperfecto en el aire acondicionado se debía a la elevada temperatura que azotaba la ciudad de La Rioja, pero el piloto de la aeronave posteriormente confirmó que existía un desperfecto con la ventilación. A su vez pidió disculpas y agradeció la paciencia. 

Guadalupe finalizó asegurando que a su criterio la aeronave no contaba con el mantenimiento necesario para volar.