Existen muchas razones médicas por las cuales es necesario el consumo de frutas y verduras. Entre ellas:

Son vitaminas en envase natural

Sun fuente de minerales (micronutrientes)

Son antioxidantes

Proveen fibras

Aportan agua en envase natural

El Dr. López Rossetti recomienda hacerse la idea de que las frutas y las verduras son medicamentos y que los distintos colores determinan la composición de vitaminas que tienen. Entonces, ¿cuál consumir? La respuesta es: las frutas y verduras de estación. De esta, forma a lo largo del año, se habrán incorporado los beneficios que aportan cada una de ellas, y además,se conseguirán a un precio más económico.

Beneficios                                                    

Disminuyen el sobrpeso

Disminuyen la prsión arteriasl

Disminuyen la diabetes

Disminuyen lasposibilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares

Sin embargo, la mayoría de nosotros no come suficiente frutas y verduras. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir por lo menos 400 g diarios para obtener sus beneficios para la salud y nutricionales. En 2017, 3,9 millones de muertes en todo el mundo se atribuyeron a la falta de consumo de frutas y verduras en cantidades suficientes (OMS, 2019). Se estima que la ingesta insuficiente de frutas y verduras es la causa de alrededor del 14% de las muertes por cáncer gastrointestinal en todo el mundo, del 11% de las muertes por cardiopatías isquémicas y del 9% de las muertes por accidentes cerebrovasculares .

Hoy más que nunca es importante adquirir mejores hábitos alimenticios promoviendo la alimentación balanceada que incluya alimentos frescos y nutritivos y evitar en la medida de lo posible los alimentos procesados y ultraprocesados.

¿Cómo incorporar la fruta y las verduras a nuestra alimentación diaria?

Se recomienda consumir una porción de frutas y verduras cinco veces al día, y al menos una variedad en las tres comidas principales(desayuno, almuerzo y cena). Esto puede hacerse de forma gradual y con frutas de temporada, que garantizan que sean alimentos frescos y económicos.

Por ejemplo, podemos incluir frutas en nuestro cereal por las mañanas o comer una de camino al trabajo y la escuela; picar o hervir frutas para llevarlas en un recipiente como colación; comenzar nuestro almuerzo con una porción de verduras picadas sin sal ni aceite, añadirlas a guisos o arroz; comer frutas de estación por las tardes y cenar con una porción.