Con los cuidados de la Enfermería de la Compañía de Jesús en San Miguel, provincia de Buenos Aires, falleció a los 84 años el padre Juan Carlos “Toto” Constable, amigo y ex compañero de estudios de Jorge Bergoglio, enviado por él ya como jesuita a la misión en el monte de la Provincia de Santiago del Estero donde permaneció más de 45 años.

Acompañado por los fieles de la comunidad parroquial de San José de las Petacas, San José de Boquerón, Santiago del Estero, el padre Constable SJ había celebrado en diciembre de 2020  sus 50 años de sacerdocio.

El padre Juan Carlos nació en Catamarca el 30 de abril de 1938, era el séptimo de 8 hermanos. Sus padres fueron María Angélica Bustamante y Guillermo Constable. Fue bautizado en la basílica de Nuestra Señora del Valle. Por trabajos de su padre a los tres años fueron a Tucumán y luego, vivió en Córdoba. 

Ingresó a la Compañía de Jesús a los 18 años en 1956. Estudió Filosofía y Teología en las Facultades Superiores de San Miguel. Fue allí donde hizo amistad con Jorge Bergoglio, el papa Francisco, de quien fue compañero durante su formación en San Miguel, Buenos Aires. Luego, estudió tres años en Santiago de Chile. Fue docente en el Colegio del Salvador y en la Universidad del Salvador enseñó Teología. 

Fue ordenado sacerdote en el Colegio Máximo de San Miguel, de manos del entonces obispo de La Rioja, monseñor Enrique Angelelli, el 19 de diciembre de 1970, con siete compañeros de los cuales cuatro aún viven. 
Una vez ordenado continuó su misión en los barrios de San Miguel, hasta 1974, cuando fue destinó por el entonces provincial de los Jesuitas, padre Jorge Bergoglio SJ, a la diócesis de Añatuya. 

Era también compositor y cantautor de música religiosa popular. Entre ellas la Canción del Testigo, Cristo Obrero, Señor Tú me llamas, Llevo una Esperanza, Dónde está el Hombre, Himno a la Virgen de Huachana, y 38 canciones más.
Recibió en su vida innumerables distinciones, entre ellas el premio Al Servicio Distinguido por parte del Rotary Club Santiago del Estero.

Esta es una distinción que la institución rotaria entrega desde 1965 a aquellas personas que por su entrega hacia la comunidad a través del servicio, deben ser ejemplo para la juventud, sus con seres y para las generaciones venideras.
La comisión especial para el estudio de propuestas para este premio, “ha resuelto otorgar el mismo al padre jesuita Juan Carlos Constable, por su trabajo en favor de los pobres en la zona de influencia de la parroquia de San José de las Petacas de San José del Boquerón”.

Aquella vez, integrantes de la entidad rotaria se trasladaron hasta el lugar de residencia del religioso, con el propósito de asistir a la parroquia en algunas de sus necesidades.

Adiós a un catamarqueño que cumplió un gran paso por esta vida, con un espíritu de ayuda y servicio a los demás.