Hoy, 19 de octubre, por primera vez se celebra a nivel nacional el Día de la Rehabilitación Respiratoria.  Es una herramienta que beneficia, mediante un protocolo de ejercicios supervisados, a mejorar la calidad de vida de los pacientes 

Al respecto, la licenciada en kinesiología Laura Carrizo, en diálogo con Radio El Esquiú 95.3, comentó: “Este 19 de octubre se llevará a cabo por primera vez la celebración a nivel nacional del Día de la Rehabilitación Respiratoria, impulsado por profesionales de la salud para que se conozcan los beneficios de esta práctica. La rehabilitación respiratoria es una práctica que se lleva a cabo para mejorar la calidad de vida como una herramienta más para los pacientes con patologías crónicas.

”En este sentido, hablamos desde la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, conocida como EPOC, a la enfermedad intersticial, como la fibrosis pulmonar, el asma, que es lo más conocido, y todo lo que sea pre y posquirúrgico; de patologías cardíacas y pulmonares, como pretrasplante pulmonar o postrasplante; todo lo que es cirugía de recambio valvular, bypass de corazón, entre otras patologías donde se indica para realizar rehabilitación respiratoria”, indicó.

En esa línea, Carrizo agregó: “Estamos hablando de que la respiración para la mayoría es una respiración fluida, sin falta de aire, donde podemos desarrollar diversas actividades en la vida diaria sin complicaciones. Y en este caso hablamos de que el paciente no puede vestirse, no puede subir escaleras, no puede caminar de corrido una cuadra o necesita el suministro de oxígeno, terapia constante.

”Entonces estos pacientes, siendo los indicados para realizar esta terapia, son los que mejoran su calidad de vida, no es una terapia que genera la cura a su patología, sino que es una herramienta más que se complementa con el tratamiento médico y todo lo multidisciplinario para que pueda mejorar esa calidad de vida, prolongar su vida y más que nada poder llevar a cabo pequeñas actividades de la vida diaria, que para ellos es un gran cambio”, aseguró.

Asimismo, Carrizo dijo: “Básicamente, cuando introducimos a un paciente en esta rehabilitación, estamos hablando de que el paciente viene a entrenar. Un paciente con patología crónica puede entrenar, porque lo que se hace luego de una evaluación en donde conocemos al paciente (y diseñamos) un entrenamiento de resistencia: se va a subir a una bici, a una caminadora y va a empezar a tener un protocolo individualizado de acuerdo a ciertas evaluaciones que nos den información para que ese paciente vaya progresando en el tiempo y mejorando.

”Luego vamos a manejar un entrenamiento de fuerza muscular. El paciente va a tener una estimación de su resistencia máxima y vamos a poder decir si tal ejercicio lo puede hacer con una carga determinada de peso. También se trabaja flexibilidad, educación y automanejo, les enseñamos qué hacer cuando tengan determinados síntomas, cómo lo pueden manejar ellos mismos sin necesidad de salir corriendo”, señaló.

Por último, comentó que “es un grupo de actividades supervisadas todo el tiempo exclusivamente para cada uno de los pacientes porque no todos tienen la misma sintomatología, no todos perciben lo mismo”.