Como cada 14 de noviembre, se conmemora el Día Mundial de la Diabetes, en la Plaza 25 de mayo se realizaron una serie de acciones de prevención y concientización sobre la enfermedad. 

Para crear conciencia sobre el impacto de la diabetes en la salud de las personas y compartir los pasos a seguir para mejorar su prevención, diagnóstico y manejo, diferentes instituciones de la provincia se unieron para dar inicio de la semana de la lucha contra la Diabetes. 

“Comenzamos el día con actividades de información, prevención y concientización de esta enfermedad, la cual es crónica. Nos acompaña OSEP realizando mediciones de glucemia a las personas; el Ministerio de Salud con lo que es consejería alimentaria, con puntual atención sobre el tabaquismo y el alcohol; y La Dirección Provincial de Odontología con el cuidado bucal que requiere en las personas con diabetes”, comentó la Lic. En nutrición, Ana Fregenal en dialogo con El Esquiú Play.

De igual manera, la médica especialista en el tratamiento de esta enfermedad Evangelina Melnik, expresó a El Esquiu Play a los beneficios de una difusión correcta y el trabajo de prevención en esta materia: “Es una enfermedad progresiva que afecta al páncreas y que va dañando los tejidos de a poco, mientras antes se descubra mejor será el pronóstico de cada persona “.

Melnik puso el foco en la detección temprana, señalando que “una de cada dos personas que tienen diabetes, no conocen que padecen esta enfermedad”. 

Sobre estas estadísticas de los pacientes es que desde diferentes organismos de salud y profesionales médicos llevan a cabo acciones de pesquisa, controlando la glucosa en sangre para obtener aproximaciones sobre el estado del paciente “teniendo en cuenta que es un síndrome que viene aparejado con otras enfermedades como el colesterol, la presión alta, obesidad”. 

A pesar de que hay varios tipos de diabetes, la diabetes tipo 2 es la más frecuente en el adulto: “Es la que más tiene que ver con la parte hereditaria. Las personas que tienen antecedentes familiares de diabetes, tanto paterno como materno, influye; pero también por la mala alimentación, el sedentarismo, la falta de actividad física estamos viendo que, cada vez más, se despierta en las personas sin antecedentes familiares”.