Noemí Sepúlveda, presidenta de Asociación Catamarqueña de Sordos (ACASO), acompañada del intérprete de señas Pablo Listro, invitaron a la comunidad a sumarse a un nuevo curso de lengua de señas que iniciará en el mes de marzo.

Este curso, permite aplicar los fundamentos de la lengua de señas, con el fin de fomentar la inclusión, la comunicación y la interacción con las personas que posean alguna discapacidad auditiva. Es fácil de aprender y solo se requiere tener conocimientos elementales. 

“La lengua de señas es muy importante para la comunicación. La lengua de señas argentina es para todas las personas que les interese aprender, porque eso significa muchas barreras para las personas sordas y para cualquier actividad, farmacias, la terminal, negocios”, expresó Sepúlveda a radio Nacional Catamarca. 

El curso es básico, dura 8 meses y a través de él “se conoce el alfabeto dactilológico, el vocabulario relacionado a familia, el vocabulario donde puedan practicar la lengua de señas para que puedan comunicarse”.

Asimismo, señaló la importancia de este un idioma viso gestual, y recordó que “no tiene nada que ver con un lenguaje, que es una capacidad que tenemos todas las personas y que desarrollamos a través de nuestro crecimiento”. 

El próximo 11 de febrero iniciarán las inscripciones del curso que comienza en marzo en la sede de la Asociación Catamarqueña de Sordos que se encuentra en la avenida Virgen de Valle Norte en la esquina Ex Combatientes de Malvinas. 

Campaña por la Ley Federal 
Por otro lado, la presidenta expresó que continúan con la campaña por la Ley Federal de Lengua de Señas Argentina (LSA), que en la práctica significa el reconocimiento lingüístico y cultural de esta comunidad. 

La campaña hace hincapié en que se reconozca legalmente a la LSA. La iniciativa, manifiesta que privar a cualquier niño o niña de una lengua es quitarle el derecho de desarrollar adecuadamente sus emociones y pensamientos desde los primeros años de vida.

Recuerda que, desde hace décadas, miles de niñas y niños sordos e hipoacúsicos continúan sin lograr una fluidez nativa y un dominio completo de al menos un idioma natural, siendo perjudicados en su posterior desarrollo personal e inserción social.

Con la Lengua de Señas Argentina, estas niñas y niños logran acceder a un desarrollo lingüístico-cognitivo acorde a su edad; y de esa manera se previene la privación lingüística y se garantiza posteriormente el pleno ejercicio de sus facultades, derechos humanos, civiles, culturales y políticos.

En la actualidad, hay varios proyectos de ley de LSA ingresados al congreso para su tratamiento. El pedido es que se considere el consensuado por las organizaciones de la comunidad sorda.