Flores: “Se acerca una tercera ola de calor, pero hoy y mañana serán días agradables”
A pesar de las altas temperaturas que han superado los promedios normales, esta semana comienza con condiciones más agradables.En diálogo con Radio El Esquiú 95.3, el profesor Uriel Flores, coordinador del Observatorio del Clima de la UNCA, ofreció un panorama detallado sobre el clima de este verano, destacando la segunda ola de calor que afectó a la región la semana pasada.
“El lunes y martes estarán marcados por cielos parcialmente nublados y temperaturas máximas de alrededor de 30 grados. Se espera que se presenten chaparrones y lloviznas dispersas, tanto en la región este como central, además de algunas tormentas. Sin embargo, esta tregua será corta, ya que hacia finales de la semana se podría desencadenar una nueva ola de calor, con temperaturas que podrían superar los 37 grados a partir del viernes y continuar hasta el lunes próximo”, comenzó detallando Flores.
Luego, destacó que este verano está siendo más caluroso que el anterior, con un incremento en las olas de calor. Por ello, se recomienda aprovechar los días más frescos de hoy y mañana, ya que las condiciones de nubosidad y temperaturas agradables son ideales para disfrutar del aire libre.
A partir del miércoles, las temperaturas comenzarán a subir nuevamente, alcanzando los 34 grados, mientras que el jueves se prevé una máxima de 37 grados. Para el fin de semana, se esperan jornadas de intenso calor con picos que podrían llegar a los 40 grados.
En cuanto a las precipitaciones, Flores mencionó que en febrero se ha registrado una cantidad de lluvia dentro de lo esperado, con alrededor de 20 mm, lo que contribuye a un buen caudal de los ríos. Este comportamiento, similar al de enero, parece indicar que las lluvias se mantendrán dentro de los promedios históricos, a pesar de que se había pronosticado menos precipitación de lo normal para el verano.
Finalmente, el profesor subrayó que las lluvias tienden a ser más frecuentes en marzo, lo que podría generar un aumento en la inestabilidad climática hacia el final del verano.