En jornadas de intenso frío, todos los actores en un partido de fútbol, obviamente lo van a sentir; ahora, las organizaciones involucradas deberían consensuar la utilización de las vestimentas adecuadas y convenientes para cada uno de los protagonistas, porque al aplicarse las exigencias reglamentarias establecidas, generalmente quienes quedan en desventaja son los jugadores.
Pasa que el reglamento de la disciplina obliga a utilizar pantalones cortos deportivos, medias, zapatillas o calzado relacionado con la práctica y remera o casacas con mangas cortas o largas.
Por el lado de los jueces aproximadamente lo mismo, salvo los colores de su indumentaria que no tendrán que confundirse con los de los equipos participantes.
Pero, las imágenes pueden mostrar con fidelidad innegable las diferencias; se podrá argumentar que los asistentes no tienen tanto movimiento como el árbitro durante el encuentro (cosa que no debería ocurrir), al igual que los arqueros,  pero, sobre todo, habría que discernir lo importante y conveniente para cada caso y circunstancia, pensando. Al menos por un  rato - que las reglas no están para aplicarse solo a unos, mientras que otros son privilegiados.