"Tercer Tiempo": ¿Pasó por las categorías formativas? Andrés Chazarreta: "Sí, en Platense de Buenos Aires, en ese tiempo nos formaban en todo sentido para ser profesionales en lo que decidiéramos emprender en la vida" "T.T" ¿Después cómo siguió? A.Ch: "A dos meses del fallecimiento de mi padre, con 16 años salgo de Buenos Aires a ganarme la vida, yá con ilusiones de continuar jugando fútbol; tomo el tren y paso por Córdoba, Recreo, llego a Tucumás y trabajo de mozo un tiempo y viajo a Jujuy, siempre con el bolsito en el que llevaba broches, peinetas y cosas para vender para de ese modo solventar pensión y comida al menos: Uno de esos días estaba desayunando con un amigo circunstancial, le cuenta al mozo que yó ugaba fútbol y éste habla con el DT de Gimnasia y Esgrima, al día siguiente yá había firmado contrato por dos años y es-taba instalado en un hotel". "T.T": ¿Con quienes se encontró de compañeros? A.Ch: "Y, en el plantel estuvieron nada menos que Lugano, Vurtoboy, el "turco" Aypur y Daniel Valencia que era dos años menor que yó y vivía ahí en el estadio, su papá era el "canchero", o sea vivía en la cancha todo el día". "T.T": ¿Luego de Gimnasia? "A.Ch: "Bueno, debo regresar a Bs. As. por el servicio militar en el Regimiento de Patricios; cuando termino mi instrucción estaba reunido con 3 amigos de fierro a los que les había comentado mis deseos de jugar en Brasil y me regalan un pasaje en colectivo para viajar hacia mi sueño. Allá me encuentro con Héctor Bertaina, había un tío empresario que tenía contac-tos con dirigentes del Club Monte Azul de la liga Paulista, institución del norte brasilero y equipo recién ascendido, hago las pruebas y firmo por dos años; la verdad que fué un acontecimiento mi llegada y conté con la aceptación hasta de la prensa futbolera. Yá en el '75 volviendo de Brasil, en Misiones me encuentro con un equipo que había ganado la participación en el Nacional, Bartolomé Mitre de Posadas y le tocaba jugar en una zona en la que estaban River, Racing, Colón, Talleres de Córdoba, San Lorenzo de Mar del Plata y Juventud Antoniana, por supuesto lle-gamos últimos cómodos, pero con una experiencia invalorable para el futuro de todos" "T.T": ¿Qué pudo aprovechar de esa experiencia? A.Ch: "Para nosotros o al menos para mí fueron experiencias valiosas; en ese tiempo la escala de valores era: primero jugar, luego conseguir mantenernos al menos con hospedaje y comida, lo demás lo manejábamos con los premios que podíamos conseguir en cada campaña, no era para ganar plata como para asegurarse el futuro, pero por sobre todas las cosas era poder jugar y prepararse para hacerlo del mejor modo con responsabilidad profesional que, creo, fué la conducta y el cuidado personal lo que me permitió tener muchas oportunidades en algunos lugares impensados". "TT": ¿Cuando y cómo llega a Catamarca? A.Ch: "De pronto recibo una carta de Héctor Bartaina que yá estaba en Catamarca y me invita a llegar a Villa Cubas, yá estaban ahí con la coducción de Jorge "el Chivo" González y con jugadores de la talla de Viani, "el Negro" Flores, J.J. González, "Lucho" Brizuela, "Rafa" Herrera, "el Barón" Miranda, que fué la pretensión de una destacada actuación en el fútbol local y regional pero, solo duramos 3 meses, todo se disolvió por algunos malos manejos y que-damos en la calle; a desandar el camino en busca de otras oportunidades, vuelvo a Jujuy, e Defensores de Alberdi, de Técnico "el Piojo" Yudica, en una época que Atlético Ledesma lo tenía a Don Angel Tulio Zoff; allí hasta que mi señora me llama por teléfono para avisarme que Don Pedro Toloza me ofrecía un trabajo y que volviera a jugar en Cata-marca, en Dep. Argentino". "T.T": ¿Esa parece ser la última etapa, o nó? A.Ch: "No en realidad, estuve en Salta y por último en Juventud Unida de Santa Rosa que preparó un equipo para el Regional en el que no fuí habilitado por tener el pase justamente en esa provincia y se lo negaron a Juventud; entonces me hacen una propuesta, paso a ser el Técnico acompañado por el Profe Juan Carlos Ahumada y en el plantel ya tenía a Jorge Rodríguez, Hugo Elizabetta, "Loco" Pintos, Pedro Avella neda entre otros y mientras, comienzo a trabajar en la Dirección de Riego; recuerdo que en uno de los memo-rables partidos le ganamos a San Martín de Tucumán (ahí jugaba "Ancuero" Nieva) que le significó el despido a "Pucho" Reinoso como entrenador del elenco tucumano, pero, en una ocasión volvíamos de jugar en Añatuya, Santiago del Estero y me duermo en el colectivo, de pronto me despierto, el cole estaba en la orilla de la ruta y alcancé a ver una de esas luces sospechosas de lugares donde los jugadores no deben concurrir; hice un revuelo para proseguir con nuestro itinerario y al día siguiente me reuní con los dirigentes y "pedí varias cabezas" involucradas en el hecho; por supuesto, perdí, no hubo sancionados y me fuí, y mientras salía por la puerta de ad-elante, ya tenían preparado al otro técnico para que entrara por la puerta de atrás". "T.T": ¿Cómo nació el proyecto de las escuelas de fútbol". A.Ch: "Me encuentro de pronto con César Normando Cruz, calificado deportista catamarqueño que ya venía con preparación y algunos preceptos para la formación de los chicos en el ámbito deportivo/recreativo y a partir del ofrecimiento del Doctor Pedro Armando Navarro - en ese momento presidente de la Caja Forense - comenzamos en el predio de la entidad con un éxito inesperado, llegamos a tener hasta 300 chicos". "T.T": ¿Promocionaría una es-cuela de fútbol para mujeres? A.Ch: "Nó y rotundamente; en ésta época en que las mu-jeres ( por suerte) han llegado a alcanzar casi idénticas preparaciones con relación a los hombres en todos los ámbitos de la vida cotidiana, y en la que consiguieron el reconocimiento de todos su derechos como seres humanos, hay que prepararse profesionalmente para conducirlas; en algún momento me ofrecieron la Dirección Técnica de un equipo femenino, pero yo, al menos, no me siento preparado para tamaña responsabilidad". "T.T": ¿Porqué cerraron las escuelitas de fútbol? A.Ch: "Conseguimos un amplio espacio para trabajar en principio; por medio de Don Pedro Garzón, titular de la Liga Chacarera, nos permitieron participar solamente en las divisiones formativas de la entidad durante una temporada, después apareció la oportunidad de representar a Deportivo La Merced con todas las divisiones inferiores y en el plano particular pasamos a ocupar las instalaciones de la Mutual del Banco de Catamarca y en un par de ocasiones junto a un profesor de la escuela nos quedamos alrededor de dos horas esperando que un padre recogiera a su hijo, cuando llegó, dijo, "saben que me olvidé", fué suficiente, hablé con mi se-ñora, profesora de educación física ella, y concluímos que era demasiada responsabilidad para nosotros y para el padre ninguna". "T.T". ¿Ahora, profe de los futuros Técnicos Nacionales? A.Ch: "Sí, me ofrecieron dictar la cátedra de Técnica y Estrategia en la carrera de Directores Técnicos Nacionales que tiene el aval de la Asociación Argentina de Tecnicos, de AFA y de la Conmebol; tengo alguna ventaja porque me recibí en la Primera Promoción que se llevó a cabo en Catamarca; ya hemos cumplido la etapa de instrucción con 56 alumnos de los 62 que se inscribieron, valioso número si se tiene en cuenta las circunstancias en que tuvimos que movernos, ahora estoy en el período de visitas a esos alumnos en sus lugares de trabajo y evaluar su preparación como forma-dores de los chicos". "T.T". ¿Tuvo participación en la Liga de Veteranos? A.Ch: "Sí, jugué un par de años en Rev Constructora y después de un parénte-sis estuve con la magnífica muchachada de San Lorenzo de Alem, junto a una gran amigo como "Rafucho" Gaitán, uno de los que me co-bijó en la necesidad, al igual que mi compadre "Chirola" Dumitru que hasta ocupé su casa por un tiempo". "T.T": ¿Fué una acierto crear la Liga de Veteranos? A.Ch: "Un absoluto acierto, que consiguió unir a muchos exfutbolistas para ocupar su tiempo libre con fines recreativos y de confraternidad" "T.T": ¿Volvería a jugar? A.Ch: Nó, ya no, en ese tiempo no tenía continuidad producto de mis compromisos laborales y luego tuve algunas lesiones que me hicieron reflexionar que debía conservar la imágen que Catamarca siempre tuvo de mí; esa que me diferenció, ya que nunca tuve demasiadas virtudes jugando, pero sí fuí muy profesional en mi cuidado". 
Muchas fueron las defini-ciones que dejó la extensa charla con Andrés, ricas para los chicos y jóvenes de nuestro tiempo, basa-das en las convicciones, el esfuerzo, mucho tesón, perseverencia y optimismo en las adversidades, preparación y cuidado per-sonal para encaramarse en el plano profesional; agradecido de su esposa por el apoyo constante en su progreso, a sus hijos en la comprensión y acompañamiento, a los anónimos (para nosotros) que estuvieron siempre prestos a tenderle una mano en los momentos difíciles, y especialmente un enamorado de Catamarca por haber sido destinatario de tan-tas oportunidades que le permitieron vivir una vida de pasión por el fútbol. Quedaron cosas por su-puesto, así que la seguiremos seguramente, pero al despedirse quiso dejar un sentido recuerdo hacia el gran Diego Armando Maradona que, como para poner un paño frío a dicha pasión, unos minutos antes nos enterábamos de su fallecimiento.