En el último tiempo se han multiplicado los juicios que modelos y algunos famosos realizan contra buscadores de internet -como Yahoo! y Google- porque al tipear sus nombres se los relaciona con sitios de pornografía o vinculados a la prostitución.
La semana pasada la sala D de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil dio a conocer la primera sentencia de segunda instancia en este tipo de juicios en la causa de la ex integrante del grupo Bandana, Virginia Da Cunha contra Google y Yahoo! Si bien el fallo en primera instancia condenaba a los buscadores a resarcir con $100.000 a Da Cunha, la Cámara falló a favor de Google y Yahoo! -por dos votos a uno- y determinó que no se los puede responsabilizar por los contenidos subidos a internet por terceros.
Al revocar la sentencia de primera instancia, el fallo se muestra como indicio de cómo podrían resolverse los demás litigios que iniciaron, entre otros, Valeria Mazza, Susana Giménez, Diego Maradona y Nicole Neumann.
Las juezas Patricia Barbieri y Ana María Brilla de Serrat, de la Cámara, expusieron como argumento que los buscadores de internet no generan contenido y no poseen la posibilidad de controlar los contenidos de los sitios a los que se llega a través de ellos.
Martín Leguizamón -abogado de Da Cunha y de otros famosos en litigio con los buscadores Google y Yahoo!- expuso que las dos juezas se expidieron sobre una cuestión “jamás planteada”.
“Nunca planteamos la responsabilidad de los buscadores sobre los contenidos; nos referimos a los links, a los enlaces que presenta el buscador en los resultados de las búsquedas. Lo dañino es el link, porque sin él y el párrafo de descripción que lo acompaña sería casi imposible acceder a los sitios en cuestión”, señaló el abogado querellante.
Otro de los abogados agregó que los buscadores sí establecen el contenido; “en sus ‘Términos y Condiciones’, Yahoo! dice que conoce todos los contenidos que indexa”. Los querellantes adelantaron que llevarán el caso a la Corte Suprema de Justicia porque consideran que el fallo es “arbitrario, contradictorio e incongruente”.