Horas atrás salió a la luz una situación que el sector educativo de la provincia de Tucumán catalogó como grave. A días del inicio del ciclo lectivo 2023 se conoció que se ofrecían en internet documentos y certificados médicos falsos a estudiantes para que sean presentados en diversas instituciones educativas.  En Facebook, abundan las publicaciones que ofrecen la realización de las fichas médicas que los niños deben presentar en las escuelas por un valor de $1500. El Colegio de Médicos provincial advirtió que la práctica pone en riesgo la salud de los niños.

En este sentido, el presidente del Colegio Médico de Tucumán, Héctor Sale, calificó la práctica de ilegal. "No sólo se está incurriendo en delitos, como usurpación del título y de la identidad de los profesionales médicos, sino que también se está poniendo en peligro la salud de esos niños", dijo.

Para acceder a una ficha médica falsificada, se debía pactar una cita por WhatsApp y, después de abonar $1500 se recibía una ficha médica o certificado de salud con todos los datos personas en blanco, pero con las firmas y los sellos de un médico, un oftalmólogo, un odontólogo y un fonoaudiólogo, según publicó el medio local La Gaceta.

Es importante aclarar que el Servicio Provincial de Salud brinda este servicio de forma gratuita, aunque existen centros de salud privados que cobran una tarifa específica por brindar este servicio.

Los expedientes médicos, según recoge la Secretaría de Educación de Tucumán en su sitio web, se utilizan "sólo para el primer ingreso" y deben estar "firmados y sellados por médicos autorizados, tanto públicos como privados".

En tanto, antes del 30 de marzo de cada año, se debe presentar un certificado de salud, con los mismos requisitos que para el documento anterior.

Por su parte, Orlando Di Marco, Dirección General de Fiscalización Sanitaria del Sistema Provincial de Salud (Siprosa), no ocultó su disgusto por esta situación y dijo: “No se puede jugar con la salud de los niños”.

Di Marco subrayó la importancia de los estudios que deben efectuarse para completar los documentos, al sostener que “se pueden detectar cuadros que únicamente un personal calificado puede identificar".

El titular de Sipros, que sigue de cerca este tipo de propuestas ilegales, también asegura que no se trata solo de un "delito informático" sino también de un "delito contra la salud".

"Hay personas que, por comodidad y por hacer un trámite fácil, se adhieren a esta situación y son engañadas, con el riesgo que significa", subrayó.