El próximo 31 de enero será feriado nacional por única vez en conmemoración del bicentenario de la Asamblea General Constituyente de 1813, conocida como "Asamblea del Año XIII". La ley que estabeció este homenaje fue sancionada en diciembre, pero según informa Télam, fue publicada ayer en el Boletín Oficial.

Esta fecha se suma a un calendario que acumulaba 17 feriados y siete fines de semana largos:

• El de Carnaval: 11 y 12 de febrero serán lunes y martes.

• 29 de marzo: será Viernes Santo en la Pascua católica.

• 2 de abril: el Día de los Veteranos y Caídos en la Guerra de Malvinas caerá martes, y el día anterior será Feriado Puente.

• 20 de Junio: el Día del Paso a la Inmoralidad del general Manuel Belgrano será jueves. El día siguiente será Feriado Puente.

• 17 de agosto: el Día de Paso a la Inmoralidad del general José de San Martín pasará al lunes 19.

• 12 de octubre: el Día de Respeto a la Diversidad Cultural pasará al lunes 14.

• 20 de noviembre: el Día de la Soberanía Nacional, al lunes 25.

El nuevo día festivo que se celebrará el último día de este mes será el feriado 18 y habilitará un octavo fin de semana largo: el 31 de enero es viernes.

La Asamblea del Año XIII fue convocada por el Segundo Triunvirato, que había accedido al poder en octubre de 1812. El objetivo fue llamar a una Asamblea que representase a los pueblos emancipados y que se definiese el sistema institucional de las Provincias Unidas y aunque no logró contar con algunos representantes del interior, esta Asamblea se inauguró el 31 de enero de 1813. El propósito era proclamar la independencia y redactar la constitución del nuevo estado.

Durante su transcurso, los intereses sectoriales dividieron a los diputados, lo que terminó con una postergación de la declaración de la independencia: se daría en Tucumán, en 1816.

Si bien no pudo redactar una constitución, sí sancionó medidas de carácter social como la "Ley de Libertad de Vientres". Eliminó la mita y el yanaconazgo, prohibió el uso de instrumentos para atormentar a reos o presuntos delincuentes, y abolió todos los títulos que denotaran nobleza de sangre. Se estableció, además, el régimen de libertos, que permitía al esclavo acceder a la libertad cuando alcanzara cierta edad o cuando se casase. La abolición de la esclavitud sólo se declaró en la Constitución Nacional de 1853.