Editorial
Dinamizarlo
Días atrás culminó en la localidad de Londres, departamento Belén, la filmación de la película “Ilumina”, producción que, aunque tuvo la colaboración de profesionales de diferentes puntos del NOA, fue llevada adelante en su mayor parte por catamarqueños: desde la dirección y guión, pasando por rubros técnicos y, por supuesto, la actuación, nuestra provincia mostró tener los recursos necesarios para desarrollar proyectos cinematográficos de envergadura que incluso compitan en circuitos nacionales e internacionales.
Hasta no hace tanto, los intentos de producir en el campo audiovisual local concentraban sus intentos en el documentalismo y en sus postales típicas de los pueblos/habitantes del interior, ámbito sin riesgos estéticos al cual fueron tan afectos algunos fotógrafos, cineastas, pintores y hasta poetas prendados del mero paisaje. El registro de lo real/originario se convirtió en el protagonista principal de esos proyectos pretendidamente artísticos.
Con la emergencia de una nueva camada de realizadores, muchos de ellos provenientes de la Escuela de Cine de la Universidad de Córdoba, se empezó a intentar propuestas de ficción -siempre más costosas y que implican innumerables esfuerzos para producirlas-, aunque mayoritariamente estuvieron vinculadas a la filmación de cortos. El festival “El Héroe”, cada fin de año, era la vidriera privilegiada de esos promisorios intentos.
Ahora, ha llegado un momento en la que la producción audiovisual entró en una etapa de madurez y se esbozan proyectos cada vez más ambiciosos. Así lo demuestra “Ilumina”, aunque también figuran en carpeta otros proyectos que podrían convertir a Catamarca en semillero de una incipiente “industria”. Ahí está el ejemplo de San Luis y su importante polo cinematográfico para alentar expectativas.
Hay muchas ventajas de incentivar este campo. Además de lo cultural, puede dar trabajo a una infinidad de profesionales, ya que se nutre de muchos oficios. Y está también la posibilidad de ofrecer los recursos naturales y técnicos a quienes busquen filmar en Catamarca.
Es de esperar que las políticas públicas sigan dedicando interés e inversiones para dinamizar un sector que podría aportar mucho al desarrollo local.