El libro de Capitanich

El gobernador chaqueño Jorge Capitanich, quien se desempeñó hace algunos años como jefe de Gabinete nacional, presentó en Catamarca su libro “Argentina Merece Más. La construcción de un país federal. El círculo virtuoso del desarrollo”, un trabajo de extenso título, pero interesante contenido, ya que allí se desmenuzan razones de la crónica crisis nacional y se propone un plan integral para salir del laberinto, lo cual representa en sí mismo un hecho positivo y valorable. Podrán las ideas de Capitanich gustar a unos más y a otros menos, podrán los caminos que señala considerarse más o menos viables, pero en definitiva el mandatario chaqueño hace lo que tanto se reclama a la clase dirigente: proponer, proyectar, presentar ideas para el debate. Ideas sin agresiones, ideas para discutir con visión de futuro. Algo tan esencial como el agua y tan escaso como el oro.

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A contramano de lo que hacen todas las fuerzas políticas, Capitanich observa que “el lanzamiento de múltiples candidaturas” en cada etapa preelectoral “es poner el carro delante del caballo”, y por ello pone primero el acento en la elaboración de un plan de gobierno para “debatir, analizar, generar un diagnóstico y promover medidas para resolver el problema”. La obra se divide en tres grandes ejes temáticos, en los que el chaqueño realiza un análisis del escenario internacional, el escenario nacional y presenta un plan sistemático de gobierno. Consta de siete capítulos que se titulan: Claves para entender la situación argentina, La construcción de un país federal, Desafíos para el desarrollo del país, Hacia una matriz productiva diversificada, Expansión y garantía de derechos, Hacia un cambio estructural, y Recuperar el sentido de grandeza. En conjunto es bueno que la política se encamine hacia ese terreno, como es positivo que el gobernador Raúl Jalil lo haya acompañado en la presentación. La apuesta al diálogo será siempre superadora en un país que convirtió la denigración del rival político en argumento excluyente para la competencia partidaria, con las consecuencias que están a la vista.

El Esquiú.com