Vanessa Miranda
“Operación Triunfo es un escalón gigante”
Cantante.
La joven cantante es oriunda de la ciudad bonaerense de Morón y se inclina desde chica a la música, pasando por diferentes bandas y proyectos musicales dentro de diferentes géneros y estilos, como el rock, pop, cumbia, merengue, cuarteto, balada, etc. En 1998 filmó el video de “Pensando en Ti” junto a Ráfaga, mientras que en 2003 participó de la grabación de dos CD para el programa Cantaniños, emitido por TELEFE. También grabó para Canal 9 el disco de la novela para adolescentes “Romeo y Julieta”, en la que fueron protagonistas Brenda Gandini (hija de Daniela Cardone) y Elías Vinole.
Su carrera cobra notoriedad a partir de su participación en Operación Triunfo 2009, certamen en el que se mantiene hasta cerca de la final. Allí, cantó junto a Ricardo Montaner el tema Déjame Llorar y formó parte del primer disco de OT, que se convirtió en Disco de Oro, tras vender 250 mil copias, interpretando los temas Juana Azurduy, y Se Dice Amor.
Actualmente, se ha convertido en una de las artistas pop más importante del momento, desarrollando giras por todo el país y el extranjero, con un show cada vez más multitudinario.
- Con tu carrera consolidándose a nivel nacional, ¿cómo te sentís cada vez que venís a Catamarca?
- Agradezco muchísimo a la gente de Catamarca el simple hecho de depositar en mí su confianza. En esta provincia me han confiado una amistad que no me pasó en muchos otros lados, salvo en Mendoza, pero no mucho más.
Para los festejos por el Día del Estudiante fue la sexta vez que estuve en Catamarca y siempre me han recibido con los brazos abiertos, con todo el calor, la buena onda y amistad. La sorpresa que me genera, es que hay mucha gente que me sigue en cada uno de los show que brindo acá. Es muy lindo ver siempre muchas caritas conocidas y eso habla de afecto.
- Si bien comenzaste a ser reconocida a partir de tu participación en Operación Triunfo 2009, tu carrera musical se inició mucho antes…
- Es cierto. Mi carrera ya viene desde hace dieciocho años, pero a partir de Operación Triunfo se abre una puerta distinta. Se generó un reconocimiento a nivel nombre, que antes no tenía. A partir de allí, todo es diferente. Que la gente diga: “Viene Vane y la vamos a ver”, es muy importante para mí.
En realidad, jamás me imaginé llegar tan lejos. Estoy a 1.200 kilómetros de mi casa y uno pretende hacer muchas cosas, pero los caminos son tan difíciles que no se lo imagina. El estar tan lejos de casa y que la gente te salude, para mí aún es todo sorpresa. A un año y medio de Operación Triunfo, recorrí muchos lugares del país y Catamarca es uno donde mejor me han tratado. Acá, llegué por el cariño que nos tenemos con mi amiga Karina Godoy, que es quien hace mis gestiones en Catamarca y es la primera que confió en mí… Gracias a ese trabajo, ya es la sexta vez que estoy por esta tierra.
- Sin dudas, Operación Triunfo te consolidó como artista…
- Operación Triunfo es un escalón gigante. Te brinda una seguridad a nivel artístico y uno lo que aprende no lo hace sólo por estar adentro de la Academia dos meses, sino por el hecho de subirse a un escenario. El escenario es lo que más te marca, te enseña y te muestra el contacto con el público.
Cuando uno no tiene un nombre en sí, sale al escenario y quién te conoce. Pero ahora, luego de Operación Triunfo, salís con un cartel gigante que te brinda un gran respaldo.
- Un momento muy especial en tu carrera es haber cantado junto a Ricardo Montaner. ¿Cómo viviste esa experiencia?
- Fue un momento muy especial haber podido cantar con Montaner. En verdad, si no fuera por los videos no lo termino de creer. Fue enorme la sorpresa, no sabía nada en ese momento del programa. Cuando lo vi, fue una experiencia y un impacto que no sabía donde estaba parada. A partir de ese instante, comencé a vivirlo como si fuera un sueño, algo que uno piensa que es inalcanzable.
Hoy en día, recuerdo ese momento y veo que me marcó mucho en lo emocional. En mi vida jamás pensé que iba a tener una oportunidad de esa naturaleza, incluso no había ensayado nada. El hecho de cantar con él, a dúo, no me lo saco más del corazón y de mi carrera artística. Fue un sueño hecho realidad.
- Interpretás diversos ritmos, ¿en cuál te sentís más cómoda?
- Me conocés bastante... Siempre canté diferentes ritmos musicales, pero me siento más cómoda con la balada, lo latino y el pop. Canto de todo y el público que me sigue es amplio, desde niños hasta también gente grande. A la respuesta de la gente uno la percibe desde el escenario y, entiendo, todo pasa por la esencia de cada uno y por cómo se es con el público. Es más importante el trato y el diálogo que lo que uno puede llegar a cantar...
- ¿Cómo te encuentra hoy tu presente artístico?
- En este momento, tratando de fortalecerme como artista y con el público. El día de mañana, cuando tenga la oportunidad de grabar mi primer disco, quisiera poder hacerlo bien segura y consolidada.
No he podido grabar aún. Lamentablemente, en el género musical está muy difícil poder sacar un CD, más que nada en Buenos Aires. Percibo que todo es más difícil para una mujer y no entiendo por qué los productores piensan que las mujeres no vendemos tanto como lo hacen los hombres. Para mí no es así, Thalia y Shakira son consagradas y venden millones de discos. Pero, sin embargo, se fijan mucho en esas cosas…
- Percibo que la música es todo para vos, junto con tu pequeña hija Juliana…
- Es muy cierto, la música es mi vida. No dejaría la música por nada, es una carrera que tiene muchos altibajos, y uno por momentos se siente muy feliz y en otros bastante triste. Viajar sola catorce horas en un colectivo…, la cabeza te va a mil. Dejas a tu bebé de tres años llorando porque no quiere que te vayas, es muy fuerte. Y lo único con que compensás eso, es arriba del escenario y con la gente abajo aplaudiéndote. Por ello, entiendo que el aplauso para un artista es el pago más grande que la vida le puede brindar.
- ¿Qué es lo que esperas para el futuro inmediato?
- A nivel carrera artística espero tener una continuidad de trabajo, lo que hoy en día es algo muy difícil de lograr. Gracias a Dios, estoy trabajando bien y eso me gratifica. Y ojalá, en Catamarca, me sigan invitando y continúen siendo tan afectuosos como hasta ahora. Es el pago más grande que tengo…