Gran Hermano se convirtió a pocas semanas de su estreno en el programa más visto de la televisión argentina. La casa más famosa del país conquistó la atención no solo de los televidentes sino también de todo el mundo virtual, dado que una gran parte de su audiencia sigue al programa por redes sociales.

Es ahí donde se armar grandes debates y sale a la luz a quién bancan dentro del reality y a quien quieren fuera. Eso sucedió con Juan Reverdito, el participante que rápidamente ocupó el rol del más “odiado”. Pero su paso por la casa terminó el pasado domingo, cuando se convirtió en el cuarto eliminado con el 88 por ciento de los votos.

Al salir de Gran Hermano, el taxista se encontró con una realidad inesperada. Comenzó a leer las miles de críticas en su contra y todo el rechazo que recibía por parte del público, algo que inevitablemente le afectó anímicamente. Pero hubo un detalle en particular que lo destrozó.

Entre los comentarios y pensamientos que recorrieron las redes sociales, Juan se encontró con personas que lo acusaron de violento, de mala persona y también de manipulador. Además, cuando asistió al primer debate tras su salida de la casa, lo cuestionaron tanto que lo terminaron de quebrar.

Tres días después de su salida, el participante de Gran Hermano asistió al programa de Georgina Barbarossa y, a corazón abierto, se sinceró sobre cómo se siente: "No soy una persona violenta, jamás tuve un problema con nadie. Cero. Me genera bronca que afuera tengan esa imagen mía porque no es la realidad. Quiero que me conozcan como en verdad soy”.

"Me pone muy mal que piensen así de mí, jugué mal pero nada más. Lo que me dio un poco de alivio fue que ayer salí a la calle y la gente fue cálida. Me decían que había jugado mal pero que así y todo me bancaban... eso fue hermoso, un alivio”, sumó.

Juan también habló de sus hijos, por un lado de su dolor al ver al mayor queriendo dejar el país, y por el otro del sufrimiento del menor por su accionar en Gran Hermano: "La espina que tengo clavada es que me mostré de una manera que no soy. Mi hijo más chico la pasó mal por los comentarios que le hacían en el colegio sobre mi persona".