Correo de lectores

Opinión militante

viernes, 4 de enero de 2013 00:00
viernes, 4 de enero de 2013 00:00

Sr. Director:

Desde hace varios años y ante el advenimiento de un espacio de tiempo electoral, a través de todos y cada uno de los matutinos lugareños, suplicaba, rogaba, pedía por solicitadas a cada diario que mi espacio político de preferencia, esto es el Partido Justicialista, armara sus listas de candidatos con los mejores exponentes...salvo contadas excepciones pudimos lograr alcanzar aceptación en la consideración del electorado, por lo que desde 1991 y por el lapso de 20 años, un frente político creado usando la emoción y los sentimientos de un pueblo, al que embaucaron con la promesa mentirosa de la erradicación, según ellos de un desgobierno conformado por familiares y allegados al poder saadista y que ayudados por la prensa interna y nacional colaboraron para instalar un engendro que la misma historia lugareña calificó como “Las Décadas perdidas”.
Mi súplica mediante solicitada era que, eligiendo una “vidriera atractiva” con hombres moral, social y políticamente destacadas que conformando una lista electoral pudiera triunfar sobre el engendro gobernante, por 20 años no se pudo lograr o no se quiso lograr, no lo sé, y luego de cada una de las muchas derrotas electorales, los militantes peronistas nos transformamos en la resaca de cada festichola del Frente Cívico y Social y de un grupo de “los nuestros”, que aunque perdimos por 20 años esos privilegiados nuestros supieron transar con la oposición y fueron siempre funcionarios u ocuparon altos cargos, acomodando como los del Frente Cívico a sus familiares y amigos. Pasó el tiempo y por esos increíbles vaivenes políticos aparece la figura de la Dra Lucía Corpacci y volteamos al demonio y desde ese momento, la militancia experimentó la esperanza y la firme convicción de que se puede, desde ese frente político en donde está inmerso mi amado Partido Justicialista.
Mi profundo beneplácito, motivo y fundamento de la presente es que a un año de asumir el enorme compromiso social de gobernar una provincia desvastada, se hace real un sentimiento de transformar esta ciudad en un lugar mejor, mucho mejor para vivir, para realizar un proyecto de vida y para que los catamarqueños se convenzan de que existen mejores hombres para enfrentar a una corrupción que se enquistó en todos los estamentos sociales de mi amada Catamarca. Así es como sabiamente la gobernadora resolvió incorporar figuras de enorme peso político que, a pesar de ser jóvenes, son poseedores de enormes trayectorias legislativas y sociales. El Dr Gustavo Saadi y “Pocho” Sáenz conocen, entienden y dimensionan la importancia de este momento social de Catamarca y el pueblo confía que estarán a la altura de las circunstancias.
Lo bueno, asimismo, es saber que a nivel municipal también se produjeron movimientos de personas en funciones que son importantísimas para el cumplimiento del proyecto político del intendente capitalino; designar al Dr. Matterson luego de llevar a la Policía Municipal a la máxima eficiencia laboral, a la Secretaría de Gobierno municipal reemplazando al Dr. Saadi, confiando que aquí también dejará su impronta personal para enfrentar los problemas sociales de una comunidad que precisa de este tipo de acciones con eficacia producido por hombres eficaces. Así como el intendente encargó el manejo de un área tan sensible a un hombre eficaz como el Dr Matterson, éste igualmente fue reemplazado en la Policía Municipal por otro hombre no sólo de confianza del intendente, como lo es José Ripoll, sino de enorme integridad y honestidad, con adicción al trabajo y con enorme e indiscutible trayectoria desde la militancia política del Partido Justicialista. “Pepe” Ripoll, al igual que Matterson, desarrolló una tarea excelente en un área que tiene íntima relación con el accionar social del municipio como lo es Higiene Urbana, Infraestructura Urbana y Servicios Generales, dejando en su reemplazo a otro excelente y honesto laburante municipal como lo es Elías Pérez. Creo y sostengo firmemente que allí existirá la gran diferencia entre el gobierno que se fue con esta nueva gestión, en que nuestros recursos humanos son óptimos y las condiciones están dadas para que estos recursos desarrollen la función que demandó cada juramento realizado sobre los textos sagrados. La tarea, estoy convencido, será muy ardua, pero confío en que estos hombres jóvenes están capacitados y respaldados para sostener una acción de erradicación de la corrupción que nos carcome las raíces desde hace 20 años.
Comencé esta carta contando mis súplicas por una vidriera de excelente calidad moral y personal de nuestros dirigentes para cumplir los roles de funcionarios en un gobierno peronista triunfante, mis sueños de militantes se están cumpliendo, pues veo a dirigentes genuinos y militantes ocupando lugares de significativa importancia, significa también que se está haciendo justicia por su honestidad, por su integridad y por su fidelidad al peronismo. Por ello gracias señora gobernadora, gracias señor intendente, este humilde militante desea para sus gobernantes y para el pueblo en general un 2013 lleno de las mejores esperanzas de un año mejor, que el Altísimo les dé mucha sabiduría para tomar las mejores decisiones y para que siempre en las prioridades, esté presente la urgencia de cubrir la necesidad de un pueblo que hace más de un año quiso girar 180° buscando una felicidad que incluya a todos. Que así sea.

Juan Carlos Arroyo
“El militante de la bicicleta”

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