Por Mariano Fredes

Hace una semana tuve la oportunidad de entrevistar a Sergio Massa y me quedé reflexionando en una frase que mencionó en una de sus respuestas: “En Catamarca un poco más de 3 de cada 10 hogares no tienen Internet “. Y a ese dato alarmante le sumo que en el interior de nuestra provincia, según datos estadísticos, la proporción se eleva negativamente y aproximadamente 7 de cada 10 personas no tiene acceso a internet. 

Tal vez para algunos resulte casi impensado decir que en este Siglo XXI no todos los habitantes de Catamarca tengan acceso a la red de redes, pero es una realidad. Conozco bastante el interior de Catamarca y puedo dar fe de que en varios lugares de nuestro interior los pobladores no pueden utilizar este sistema de comunicación, información, educación y entretenimiento.

Siguiendo un poco las estadísticas, vemos que Catamarca es una de las provincias que tiene menor oferta de ancho de banda. Por ejemplo, Capital Federal tiene una oferta que abunda y ronda entre los 30 y 45 megas, en cambio en Catamarca el promedio de ancho de banda no supera los 3 megas.

A esta serie de datos desalentadores podríamos añadir muchos más, y todo nos llevaría a pensar en la falta de inversión por parte de la principal empresa distribuidora, que durante años tuvo el monopolio del servicio.

Está claro que esta brecha digital le resta oportunidades al desarrollo de las regiones. Y repercute en la vida cotidiana. Sin ir más lejos, la AFIP -que desconoce aparentemente estos datos- dispuso que desde este lunes todos los monotributistas realicen sus facturas on line. La decisión evidentemente no contempla que no todas las localidades de nuestro interior tienen servicio de internet, y otras tienen un servicio muy precario. 

Teniendo en cuenta que hoy vivimos en la era digital, donde los trámites, las compras, los estudios, etc., se realizan a través de plataformas digitales, podemos decir que estamos viviendo una desigualdad digital mayúscula, y que ese es uno de los factores que nos genera atraso en el desarrollo, tanto personal como regional.

Creo que internet es un eje  fundamental para que podamos desarrollar nuestro interior, y generar oportunidad para que los más jóvenes no emigren y puedan desarrollar sus actividades en lugares con acceso al mundo.